Más cuerpos se encontraron en el edificio que la semana pasada colapsó en Bangladesh, lo que elevó el viernes la cifra de fallecidos a 450, mientras los trabajadores utilizan grúas cuidadosamente para retirar los escombros de concreto.
"Todavía estamos procediendo cautelosamente para poder sacar los cuerpos intactos", dijo el general mayor Chowdhury Hassan Suhwardy, comandante de la guarnición del ejército que supervisa la operación de rescate.
La cifra oficial de desaparecidos todavía es de 149, aunque los cálculos no oficiales son mayores.
El colapso del edificio de ocho pisos donde había cinco fábricas textiles en los pisos superiores es el peor desastre en la historia de la industria textil de Bangladesh, que genera 20.000 millones de dólares anuales y abastece a marcas mundiales.
El propietario del Mohammed Sohel Rana está bajo arresto y se espera que sea acusado de negligencia, construcción ilegal y de obligar a los empleados a acudir a trabajar pese a los riesgos, cargos que son castigados con un máximo de siete años en prisión. Las autoridades no han dicho si agregarán más acusaciones posteriormente.
La Corte Suprema de Bangladesh ordenó al gobierno confiscar la propiedad de Rana y congelar los activos de los propietarios de las fábricas en la Plaza Rana para que el dinero pueda utilizarse para pagar el salario de los trabajadores.
Rana tenía un permiso para construir cinco pisos, pero agregó tres más sin autorización. Después de que aparecieron grietas en el edificio, testigos dijeron que Rana le dijo a la gente que era seguro entrar a pesar de que la policía ordenó que fuera desalojado. Un banco y algunas tiendas se negaron a abrir, pero los administradores de la fábrica textil pidieron a los obreros que regresaran. Horas después, el edificio colapsó, quedando una pila de concreto.