El descubrimiento de restos arqueológicos en el valle del río Yangtzé, que pertenecen al Reino de Liangzhu que data del Neolítico, cuestionan que la civilización china se formara en las planicies centrales del río Amarillo, así como también que la dinastía Xia fuera la primera, publicó hoy el diario China Daily.
En 2007, los arqueólogos chinos hallaron los restos de un núcleo urbano que consideran puede ser la ciudad perdida del reino de Lianghzu, que tiene entre 4 mil y 5 mil 300 años de antigüedad y que sería por lo tanto anterior a la dinastía Xia que se sitúa entre los años 2100 y 1600 a.C.
Los nuevos estudios antropológicos están siendo realizados por el Instituto de Arqueología de la Academia China de Ciencias Sociales y están encabezados por su director, Wang Wei, que destacó que "se están utilizando métodos más empíricos en vez de basarse en lo que revelan los textos antiguos".
Desde 2004, el instituto está precisando la cronología prehistórica de la civilización china a través de métodos multidisciplinarios.
"Habíamos aceptado que la cultura china se originó en la cuenca del río Amarillo pero a medida que avanzamos en nuestros estudios encontramos que en el desarrollo de la civilización china también contribuyó la evolución de núcleos regionales", explicó Wang.
En 2001 se hallaron las ruinas de la ciudad de Jinsha, cerca de Chengdu, capital de la provincia central de Sichuan y que se calcula tiene alrededor de 3 mil años de antigüedad.
Este nuevo hallazgo se encuentra a más de 1.000 kilómetros de distancia de la cuenca del río Amarillo.
El investigador Andrew Lawler opinó que "los recientes descubrimientos son una oportunidad para indagar en el origen de China", ya que éste es un tema confuso y complicado en los círculos académicos chinos.
Y, aunque el estudio todavía no está finalizado, parece que revelará que, al contrario de lo que hasta ahora se pensaba, la cultura china se formó a través de la unión de diferentes culturas milenarias.