El número de muertes por armas de fuego en Brasil aumentó un 346,5 % en tres décadas al pasar de 8.710 en 1980 a 38.892 en 2010, según un estudio divulgado por el Centro Brasileño de Estudios Latinoamericanos (Cebela) y la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso).

Las cifras son más preocupantes si se tiene en cuenta sólo a las víctimas de entre 15 y 29 años, población en la que el aumento del número de muertos por armas de fuego fue del 414 % en el mismo período al subir de 4.415 casos a 22.694, según el estudio coordinado por el sociólogo Julio Jacobo Waiselfisz.

Los números tienen en cuenta homicidios, suicidios, accidentes y muertes con armas de fuego en las que se desconoce la causa.

En las tres décadas el número de homicidios con armas de fuego creció un 502,8 %, seguido por el de suicidios (46,8 %), mientras que el de muertes por accidentes cayó un 8,8 %. 

El número de muertos creció a un ritmo del 7,3 % anual entre 1990 y 2003, cuando llegó al máximo de 39.325, y desde entonces ha caído ligeramente.

"El Estatuto y la Campaña de Desarme, puestos en marcha en 2004, parecen ser los factores de peso para explicar ese importante cambio de tendencia", explicaron a Efe los autores del estudio al referirse a la legislación que dificultó la tenencia de armas y a una campaña que retiró miles de ellas de las manos de los brasileños.

Según los autores, esas políticas, aunque consiguieron frenar la tendencia de crecimiento acelerado de la mortalidad, no tuvieron suficiente efectividad para revertir el proceso.

Además del número absoluto de víctimas, también creció en el mismo periodo la tasa de mortalidad por armas de fuego.

Mientras que en 1980 en Brasil se registraban 7,3 muertes por armas de fuego por cada 100.000 habitantes, esa proporción subió a 20,4 muertes en 2010, lo que representa un aumento del 178,6 %.

Para la población entre 15 y 29 años, la tasa de muertes por arma de fuego subió desde 12,8 por 100.000 habitantes en 1980 hasta 44,2 en 2010, lo que supone un salto del 245,8 %.

Brasil, con 20,4 muertes por cada 100.000 habitantes, es el noveno país en número de muertes por arma de fuego entre cien analizados por la Organización Mundial de la Salud (OMS). A Brasil lo superan países como El Salvador, Venezuela, Guatemala y Colombia.

Según el estudio, basado en estadísticas del Ministerio de Salud, entre 1980 y 2010 murieron en Brasil 799.226 personas por armas de fuego, de las que 670.946 fueron víctimas de homicidio, 34.052 de suicidio y 14.764 de accidentes.

Los homicidios, que representaban el 70 % de las muertes por armas de fuego en 1980, subieron al 94,6 % en 2010.

"Esas cifras ya son asustadoras, pero es aún más preocupante saber que 450.255 víctimas de arma de fuego entre 1980 y 2010 fueron jóvenes de entre 15 y 29 años de edad", según el estudio.

"El 30 % del total de muertes de brasileños de entre 15 y 29 años en 2010 se produjo por arma de fuego. Es decir que una de cada tres muertes juveniles en Brasil es resultado del disparo de un arma de fuego. De lejos es la mayor causa de mortalidad entre los jóvenes", agrega el texto.

Según los autores, el número de homicidios por arma de fuego en Brasil es el mayor del mundo, por encima de países más poblados como China e India o de países que sufren conflictos armados.

En Brasil, país sin disputas territoriales, guerras civiles, movimientos secesionistas o enfrentamientos religiosos, raciales o étnicos murieron 192.804 personas por disparos entre 2004 y 2007, mientras que en el mismo periodo los doce mayores conflictos del mundo se cobraron 167.574 vidas, según el informe.

Los autores del estudio citan estadísticas según las cuales en Brasil hay 15,2 millones de armas en manos de civiles, de las que 8,5 millones no están registradas.