En 1992, la comuna de Ñuñoa tenía una población cercana a los 187 mil habitantes. Esa cifra bajó el 2002 a 163 mil. Las proyecciones, entonces, decían que los residentes seguirían disminuyendo y se reducirían hasta los 120 mil en 2020. Gran parte de ellos, cerca del 70%, estimaban, serían adultos mayores.
Pese a todos esos pronósticos negativos, la realidad fue muy diferente. Según las cifras del último censo y los estudios que posee el propio municipio de Ñuñoa, el número de habitantes de la comuna subió hasta llegar cerca de los 200 mil. Mucho de ese crecimiento está dado por familias jóvenes con hijos de corta edad. El nuevo escenario modificó los intereses de los habitantes.
Por esa razón, de cara a la confección de un nuevo Plan de Desarrollo Comunal para inversiones entre los años 2015 y 2020, la jefatura edilicia decidió realizar una serie de sondeos ciudadanos en diversos barrios de la zona. Esto, con el fin de determinar los focos en que se centrará la inversión o las políticas de fomento de infraestructura o mobiliario urbano.
"Queremos saber a qué aspiran nuestros vecinos, cuáles son las cosas que quieren que prioricemos a corto plazo y a mediano, ya sean mejoras en su entorno como luminarias, corte de árboles o aseo o bien, a futuro como estacionamientos subterráneos, áreas para diversión o esparcimiento entre otras", explica el alcalde de Ñuñoa, Pedro Sabat.
A partir de la próxima semana se comenzarán a efectuar las encuestas que contendrán entre 10 a 12 preguntas y se realizarán de forma presencial. Con ellas se pretende recoger la opinión de los residentes en diversas materias que incluirán seguridad y áreas verdes, entre otros. El edil asegura que "la idea es que podamos obtener información renovada de nuestros habitantes con una muestra que supere el 20% de los hogares y que llegue a la mayor cantidad posible de ellos".
Según Sabat, por ejemplo, una consulta similar en 2005 arrojó resultados como la falta de retail, cines o áreas gastronómicas. Gracias a esa inquietud ciudadana se fomentó la habilitación de los estacionamientos subterráneos y el bulevar de Plaza Ñuñoa, entre otras obras y políticas locales.
Método consultivo
Para el proceso se contará con 10 encuestadores que son parte del mismo municipio y una decena de jóvenes que apoyará la labor. Contarán con identificación, vestimenta especial para que sean reconocidos por los vecinos.
El trabajo de campo comenzará en las últimas semanas de marzo y se extenderá por cerca de un año. "Vamos a visitar los hogares principalmente los fines de semana y en los horarios después de las 19 horas en los días laborales", comenta el director de Obras de Ñuñoa y encargado de la consulta, Carlos Frías.
La idea es que la primera parte de la iniciativa tome las opiniones de 2.500 hogares en los primeros meses. Las zonas que serán sondeadas inicialmente serán las de carácter más residencial. Por esa razón, comenzará en el barrio Amapolas conformado por entre las calles San Juan de la Luz y Armando Cabrera, por el norte; Emilia Téllez, por el sur; Eliecer Parada, al oeste y al este, Rosita Renard. Luego será el turno de conjuntos habitacionales como la Villa Frei, entre otros sectores.