El Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, afirmó hoy que el statu quo en el sistema de salud de su país es "insostenible", y reiteró que ha llegado el momento de abordar su reforma, en un discurso en Ohio que marca su último y renovado impulso para lograr que la propuesta sea votada esta misma semana.

"Este statu quo en salud es sencillamente insostenible. No podemos tener un sistema que funcione mejor para las compañías aseguradoras que para los estadounidenses", afirmó Obama, quien rechazó de plano los llamados de la oposición republicana a "empezar de cero" en las negociaciones sobre la reforma.

"Hemos debatido la reforma en Washington durante más de un año. Todas las propuestas han sido puestas sobre la mesa. Se han dado todos los argumentos", recordó el mandatario.

Frente a las voces que afirman que no cuenta con el suficiente número de votos para impulsar la reforma, ni siquiera en sus propias filas demócratas, Obama afirmó que no se trata de una política "partidista", y aseguró que ambas formaciones "han encontrado muchas áreas de consenso".

Además de hacer un nuevo recuento de los beneficios que su propuesta de reforma conlleva a los estadounidenses, Obama advirtió de que el debate va más allá del propio sistema de salud y de la política.

"Lo que está en juego en este debate no es sólo nuestra capacidad de resolver este problema, sino nuestra capacidad de resolver cualquier problema", sostuvo.

"Los estadounidenses quieren saber si Washington puede todavía proteger sus intereses y su futuro. Están esperando que actuemos. Están esperando que lideremos", alertó a los legisladores norteamericanos, a los que instó a "aprobar la reforma" que, aseguró, está "ansioso" de firmar.

"Necesitamos valor" para aprobar la reforma, insistió en su discurso.