El Presidente de EE.UU. Barack Obama dijo que espera transferir el liderazgo militar en Libia a sus aliados en cuestión de días y no de semanas. En una rueda de prensa con su par chileno, Sebastián Piñera, el mandatario estadounidense explicó que la primera fase -incursión militar- cederá a una transición donde participen los países aliados y la OTAN.
La rapidez de dicha transferencia está supeditada a las recomendaciones de "nuestros jefes militares", indicó.
Manifestó que el objetivo militar en Libia es proteger a la población civil de los ataques de las fuerzas del líder libio Muammar Gaddafi.
"No podemos quedarnos sólo con las palabras vacías", dijo Obama. Y agregó que "había que emprender acciones (...) El régimen de Gaddafi estaba matando civiles".
"Lo que hemos hecho es crear las condiciones para mantener la zona de exclusión aérea y le hemos mandado el mensaje a Gaddafi que necesita comenzar a retirar sus tropas", apuntó.
De esta forma Obama entregó una señal ante las inquietudes de algunos países respecto a una cierta descoordinación de los aliados en torno a la operación militar. De hecho Francia manifestó que la coalición no está "integrada" y Reino Unido junto a Italia reclaman el paraguas de la OTAN al mando de la fuerza. El propio portavoz adjunto del Ministerio de Defensa francés, el general de brigada Philippe Pontiès, declaraba que la coordinación de las operaciones es un asunto "extraordinariamente complejo".
"Ahora habrá una transición con nuestros aliados europeos y árabes para mantener la zona de exclusión aérea, somos sólo un aliado entre muchos", insistió Obama