La Cumbre de Ciberseguridad y Protección del Consumidor fue el lugar elegido por el presidente Barack Obama para anunciar una orden ejecutiva que aumenta la colaboración que las compañías de tecnología deben dar a las agencias de seguridad estadounidenses.

A pesar de la importancia de la reunión, realizada ayer en la U. de Stanford, California, los CEOs de tres de las firmas de tecnología más importantes del planeta no asistieron: Mark Zuckerberg (Facebook), Marissa Mayer (Yahoo), y Larry Page y Eric Schmidt (Google), dando un claro mensaje sobre su posición respecto a las constantes peticiones de información que reciben del gobierno.

Apple fue la única compañía que confirmó la presencia de su director, Tim Cook, a la cita, en concordancia con su política de que es posible conseguir mayores cambios ejerciendo una presión activa que mirando desde lejos. En su discurso, Cook aseguró que la privacidad de los usuarios es de vital importancia para la compañía que dirige, "a los que deben nada menos que la mejor protección que la tecnología a su alcance pueda proveer".

La orden presidencial es una gran jugada del ejecutivo hacia las empresas de Silicon Valley, reticentes a una cooperación total con el gobierno y sus prácticas de vigilancia, sobre todo a raíz de las revelaciones hechas por Edward Snowden sobre el actuar de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA, por sus siglas en inglés) y la carencia de reformas legislativas en un senado dominado por los republicanos.

La cumbre contó con la presencia de cerca de 1.000 ejecutivos corporativos y agentes de seguridad, donde se discutió cómo EE.UU. debe dirigir la lucha contra los ciberataques y las repercusiones que recientes hechos de este tipo han tenido en el funcionamiento de empresas como Sony Pictures, JPMorgan Chase, Target y Home Depot, entre otras. Estos ataques han comprometido información personal y datos de tarjetas bancarias de millones de estadounidenses, además de afectar el funcionamiento normal de las firmas involucradas.

La cita también buscó establecer una serie de estándares que cada compañía deberá cumplir para asegurar la correcta protección de los derechos civiles de los ciudadanos, además de coordinar el trabajo con el recién formado Cyber Threat Intelligence Integration Center, organismo que va a compartir y analizar los datos sobre potenciales amenazas cibernéticas.

Uno de las mayores críticas al plan de Obama, sin embargo, es que solo pide a las compañías que compartan más información, pero no a las agencias de seguridad.

OTRAS INICIATIVAS

Si bien Mark Zuckerberg se mantuvo al margen de la Cumbre de Seguridad, no es ajeno a la necesidad de trabajar en equipo para prevenir futuros ataques.

Es por esto que decidió crear ThreatExchange, una plataforma colaborativa que reúne a algunos de los nombres más importantes de la tecnología e Internet, como Twitter, Yahoo, Pinterest, Bitly y Dropbox en la lucha contra botnets, malware y hackers en la red.

La herramienta creada por la red social busca que las empresas de tecnología compartan información de seguridad de manera eficiente y rápida, algo que hasta el momento se ha vuelto muy complejo de resolver dada la tremenda cantidad de información y tipos de ataques que éstas enfrentan a diario. Por otro lado, Fortinet, McAfee, Palo Alto Networks y Symantec crearon la Cyber Threat Alliance, que cuenta con recursos dedicados de manera exclusiva para la lucha y difusión de las amenazas y cibercriminales que descubran.