El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ofreció su apoyo al Departamento de Policía de Nueva York, tras el asesinato de dos oficiales supuestamente para vengar las muertes de varios afroamericanos.

Obama, que se encuentra de vacaciones en Hawái, habló con el jefe del Departamento de Policía de Nueva York, William Bratton, para trasladarle sus condolencias y expresarle su "total apoyo" para "cualquier tipo de asistencia" que pueda necesitar, informó la Casa Blanca.

En su conversación, el presidente reiteró su petición para que la población "rechace la violencia y las palabras dañinas" e hizo un llamamiento para que haya un "diálogo paciente", indicó el portavoz de la Casa Blanca, Eric Schultz.

"Los funcionarios del Gobierno continuarán trabajando con líderes de todo el país para difundir el mismo mensaje", dijo el portavoz en un comunicado.

Obama indicó a Bratton que su equipo continuará siguiendo la situación en Nueva York, ante las protestas desatadas en las últimas semanas contra la violencia policial, y le reiteró su apoyo.

Los dos policías muertos, Rafael Ramos y Wenjian Liu, se encontraban en el interior de su vehículo cuando el agresor, identificado como Ismaaiyl Brinsley, de 28 años, se acercó y abrió fuego.