Como "una tormenta potencialmente muy peligrosa e histórica", calificó el Presidente de EEUU, Barack Obama, la irrupción del huracán Irene en la costa este del país.
Desde su lugar de vacaciones, en Martha's Vineyard, Massachusetts, el mandatario estadounidense dijo a la población que si reciben orden de evacuar "síganla, no esperen". Agregó que existe todo el apoyo central a los gobernadores locales, en todas las medidas de precaución.
Hay líneas de tren cortadas entre la capital y el sur del país, varios aeropuertos que podrían ser cerrados este fin de semana y especial preocupación en Nueva York, apuntó el mandatario estadounidense.
Irene podría causar "una interrupción de la corriente eléctrica de vastas proporciones", afirmó hoy, también el departamento para la seguridad interior estadounidense.
Antes del llamado de Obama, la secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano instó a la población de la costa este a prepararse a la eventualidad de que ocurra una emergencia como esta, en momentos que el fenómento climático es esperado hoy sobre la costa de Carolina del Norte, y el fin de semana en el nordeste del país, en especial en Nueva York y Washsington.
"La ventana para los preparativos se está cerrando rápidamente", advirtió Napolitano, que aseguró que el gobierno se toma "muy seriamente" la amenaza que supone Irene. "Escuchen a las autoridades locales y estatales y, si les dicen que evacuen, háganlo, por favor", pidió la funcionaria.
Irene, que en las últimas horas fue reducido a categoría dos, continuaba avanzando hoy con vientos máximos sostenidos de 175 kilómetros por hora en paralelo a las costas de Florida. Se espera que en horas de la mañana del sábado toque tierra a la altura de Carolina del Norte, donde las evacuaciones de las zonas costeras continuaban hoy.
Napolitano participó en una conferencia de prensa junto con el director de la agencia federal para emergencias FEMA, Craig Fugate; el director del Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Miami, Bill Read, y la presidenta de la Cruz Roja Estadounidense, Gail McGovern, en un nuevo esfuerzo de las autoridades para convencer a la población de los peligros de un huracán que, subrayaron, tendrá un fuerte impacto no sólo en la zona costera sino "bien tierra adentro".
En la mente de muchos están las devastadoras consecuencias que tuvo el huracán "Katrina" en Nueva Orleans hace casi exactamente seis años. Se espera que en las próximas horas y días Irene castigue zonas costeras y del interior desde Carolina del Norte hasta Nueva York, ciudad que ya ha comenzado también los preparativos y las primeras evacuaciones, de acuerdo con reportes.