El Presidente de EEUU, Barack Obama, y su equipo intentarán quitarle protagonismo a los republicanos intensificando su campaña electoral durante los debates de la convención nacional de sus rivales, que se realizará la semana próxima en Florida.
Cuando los republicanos se reúnan el lunes en Tampa, en la primera de las cuatro jornadas que culminarán con la investidura formal de Mitt Romney, los demócrata desplegarán al vicepresidente Joe Biden a Florida, un estado clave en los comicios del 6 de noviembre, donde participará en mítines electorales. Al menos uno de ellos tendrá lugar en Tampa.
De igual forma, Obama se desplazará el martes y el miércoles a no menos de tres estados potencialmente decisivos. En el segundo y tercer día de la convención republicana, estará nuevamente en Iowa, a donde ya realizó una gira de tres días a mediados de agosto, y luego en Colorado y Virginia.
En Ames (Iowa), Fort Collins (Colorado) y Charlottesville (Virginia), el gobernante pronunciará discursos en universidades, donde se asegurará la presencia de un público joven y entusiasta.
Michelle Obama también concurrirá, ya que el miércoles participará en el popular programa "Late Show" con el animador David Letterman en la cadena CBS.
El anuncio de esa aparición de la primera dama, cuya popularidad supera el 60%, tiene lugar después de que The New York Times informara ayer que las grandes cadenas de televisión (NBC, ABC y CBS) no difundirán en directo el discurso de la esposa del candidato republicano, Ann Romney, ante la convención en Tampa el lunes de noche.
Al ocupar el terreno, a pesar de que no está prevista ninguna actividad el día mismo de la designación de Romney, el jueves, el equipo de Obama rompe con una tradición de cortesía que imponía cierta discreción a los candidatos durante la convención de sus rivales.
Interrogada sobre esto, una vocera del comité de campaña de Obama destacó que "esta elección será muy disputada, y no descuidamos ningún voto ni ningún día" de campaña.
A su vez, un vocero del Partido Republicano, Tim Miller, minimizó el alcance de la visita de Biden a Tampa, estimando que sus discursos, "inevitablemente llenos de meteduras de pata, sólo servirán para poner de relieve los contrastes entre las valientes soluciones propuestas por la fórmula Romney-Ryan para recuperar la economía y una administración (demócrata) que no cumple sus promesas".