El Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, reiteró hoy su compromiso con la reforma migratoria durante una reunión de la secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano, con defensores de los cambios en las leyes migratorias, quienes apreciaron el gesto pero reclamaron acciones y fechas concretas.

Unos 130 representantes de organizaciones defensoras de los derechos de los inmigrantes, sindicatos, grupos policiales y religiosos, entre otros, se reunieron hoy durante más de dos horas con Napolitano en un edificio aledaño a la Casa Blanca, para discutir la reforma migratoria que formó parte de las promesas de campaña de Obama, pero que, según lamentan algunos grupos, está siendo retrasada en la agenda del mandatario.

El director ejecutivo de la organización America's Voice, Frank Sharry, calificó el encuentro de "paso positivo", pero indicó que "la prueba real estará en las acciones concretas que se tomen en las próximas semanas y meses".

"Según avanzamos en este proceso, esperamos ver liderazgo público y activo de parte de Napolitano en favor de la reforma migratoria amplia, una propuesta concreta ante el Congreso temprano este mismo otoño (boreal) y la constante promoción por parte del presidente de este importante y urgente asunto", reclamó tras la reunión Sharry, quien recordó que hay "mucha frustración" en la comunidad hispana por la falta de "resultados concretos".

El encuentro de hoy y la aparición de Obama "es un paso positivo, pero no lo será si escuchamos retórica sin ver acciones concretas", alertó en conversación con periodistas.

En el mismo sentido se expresó el director de campaña del Center for Community Change, Gabe González.

La presencia de Obama en el encuentro "es una buena señal, pero las acciones son más importantes que las palabras", declaró. "Necesitamos acciones, no sólo palabras", insistió.

El propio Obama había admitido durante la Cumbre de Guadalajara hace diez días que la reforma migratoria tendrá que esperar, porque su agenda está muy cargada, especialmente con la otra gran reforma que impulsa su ejecutivo, la del sistema de salud.

Sin embargo, en el encuentro de hoy el mandatario aseguró que el tema migratorio será avanzado este mismo año.

"El presidente ha dicho siempre que empezaríamos a trabajar en la reforma integral de la inmigración este año y es lo que estamos haciendo", dijo tras la reunión el portavoz para medios hispanos de la Casa Blanca, Luis Miranda.

Obama "entiende que el sistema de inmigración no funciona y necesita ser arreglado, y por eso le pidió a la secretaria Napolitano que trabajara con las partes interesadas y los miembros del Congreso para realizar avances en el proceso legislativo respecto a este importante asunto", recordó el vocero.

Napolitano por su parte describió el encuentro de hoy como "una oportunidad importante para escuchar a las partes interesadas" en la reforma migratoria, según un comunicado emitido tras la cita.

"La secretaria nos dijo que comprende que debe comunicar mejor (la necesidad de la reforma) y realizar un trabajo de liderazgo en ese sentido más consistente, pero necesitamos ver hechos para estar seguros de que realmente entendió el mensaje", declaró el director del Foro Nacional de Inmigración, Ali Noorani, otro de los participantes en la cita.

Por su parte, el vicepresidente de la Cámara Hispana de Comercio en Estados Unidos, David Ferreira, dijo que la reunión sirvió para "reasegurar" a los grupos que promueven la reforma migratoria y dijo ser consciente de los obstáculos que ésta afronta.

"Entendemos que hay problemas y realidades legislativas de logística", indicó Ferreira, según el cual lo importante es que la reforma "no se acelere a un paso que aseguraría que la vayan a derrotar, porque ya fracasó una vez y no podemos dejar que fracase de nuevo", advirtió.