Apenas tres días después de que el Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ofreciera la cuenta anual de su gestión en el tradicional discurso del Estado de la Unión, en el que hizo un llamado de atención al Congreso, el periodista de la cadena CNN Jake Tapper conversó con el mandatario sobre los principales temas que afectan al país.
Su mensaje en el discurso del Estado de la Unión es que lo que no se pueda lograr con el Congreso, lo hará con órdenes ejecutivas. ¿Cuánto puede lograr con eso?
Primero que todo, mi gran impulso es asegurarme de que estamos concentrados en la oportunidad, asegurarnos de que cada día, todos nosotros en Washington estamos tratando de pensar sobre las formas en que podemos ayudar a la gente a tener buenos trabajos, asegurarnos de que están entrenados para los buenos trabajos que existen, asegurarnos de que esos trabajos tienen un sueldo y asegurarnos de que nuestros niños tengan buena educación. Esos son temas que a los estadounidenses aún les preocupan. Y, por supuesto, podemos hacer más si el Congreso es capaz de hacer avances en los temas que están estancados. Si somos capaces de, por ejemplo, aprobar la reforma migratoria, que le dará crecimiento a nuestra economía, reducir nuestros déficits...
Lo he cubierto por mucho tiempo. Recuerdo durante la campaña que mencionó que su presidencia sería un momento en el que la nación y el mundo se sanarían. Ahora habla de órdenes ejecutivas. ¿Era más inocente entonces o ha recalibrado sus expectativas y sus ambiciones?
Parte de eso es que tenemos mucho de eso hecho. Tenemos en este país un sistema de salud que cubre a millones de personas y que se asegura de que cualquiera que tenga seguro no será descartado por una enfermedad preexistente. Hemos avanzado enormemente en educación. En ningún caso mis expectativas se han disminuido, pero lo que es cierto es que tenemos un gobierno dividido ahora.
Sé que un camino hacia la ciudadanía y la reforma migratoria es muy importante para usted. Es importante para los demócratas y otros. ¿Vetaría un proyecto de reforma que otorgue estatus legal para millones de indocumentados, pero no les dé ciudadanía?
Bueno, no voy a prejuzgar los proyectos que puedan llegar a mi escritorio. Creo que no queremos tener dos clases de personas en Estados Unidos. Es un principio en el que está mucha gente de acuerdo, no sólo yo, no sólo los demócratas. Estoy motivado por la ley bipartidista que se encuentra en el Senado. Creo, sinceramente, que el presidente de la Cámara, (John) Boehner, y un número de republicanos de la Cámara, gente como Paul Ryan, de verdad quieren conseguir un proyecto serio de reforma migratoria. Hay que tener en cuenta que el proyecto del Senado y la legislación que he respaldado mencionan un largo proceso para obtener la ciudadanía. Tienes que pagar multas, tienes que aprender inglés, tienes que devolver impuestos. Y al final de eso vas a tener la ciudadanía.
Si el presidente de la Cámara propone algo que de inmediato no haga que la gente sea deportada, que las familias no sean separadas, y que seamos capaces de atraer a los mejores estudiantes jóvenes (...) y que luego haya un proceso regular hacia la ciudadanía, no veo cuán grande es la diferencia.
No creo que los republicanos de la Cámara aprueben nada que lleve a la ciudadanía.
Bueno, aquí hay buenas noticias. Hay un deseo de aprobar una ley. El hecho de que apoyen algo es un progreso.
Otro tema importante acá tiene que ver con la legalización de la marihuana. Usted dijo que pensaba que fumar marihuana era un mal hábito, no creía que era peor que beber alcohol. Eso contradice la política oficial de la administración Obama, que la considera un narcótico clase 1.
El punto más amplio, basándose en evidencia científica, es que la marihuana para los usuarios casuales, las personas que la consumen regularmente, pueden cometer abusos, como con el alcohol, y deberían ser tratados como problemas de salud pública. Mi preocupación es cuando tienes a un criminal peligroso, a consumidores que son castigados de manera desigual y en algunos casos existe disparidad racial. Creo que eso es un problema. Vamos a ver qué pasa en los experimentos en Colorado y Washington. En el largo plazo, creo que sí podemos hacer frente no sólo a la marihuana, sino también al alcohol, cigarros, drogas más duras, y eso significa que nuestros niños no tengan esos hábitos.
Estaba pensando sobre este Papa, sobre que hay mucha emoción de que vaya a cambiar todo. ¿Quiere hablar con él sobre cómo manejar las expectativas?
Hasta ahora he estado muy impresionado con la forma en que se ha comunicado con lo que creo es la esencia de la fe cristiana y ese verdadero sentimiento de hermandad y ese verdadero sentimiento de preocuparse por los menos afortunados. Mi sospecha de lo que he visto hasta ahora es que es bastante estable, no creo que necesite mi consejo sobre cómo seguir siendo humilde.
¿A él no le preocupan sus niveles de aprobación?
No creo. El es alguien que está muy enfocado en su fe y que necesita asegurarse de que la gente, no sólo los católicos, sino la gente en todo el mundo, viva el mensaje que cree es consistente con las lecciones de Cristo. Estoy muy impresionado con él hasta ahora.