El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se reunió en la noche del jueves en Silicon Valley, California, con los jefes de las principales empresas de tecnología, entre ellos, los fundadores de Apple, Steve Jobs, y de Facebook, Mark Zuckerberg.
Obama buscó consejo entre los empresarios del sector tecnológico sobre innovaciones para la sociedad digital y creación de puestos de trabajo. Pese a los rumores sobre su mal estado de salud, Jobs no faltó a la cita.
Los directivos del sector saben "mucho sobre la generación de puestos de trabajo en el sector privado", dijo el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney.
En enero, en su discurso sobre el Estado de la Nación, Obama había mencionado a empresas como Facebook y Google como un modelo para el futuro de la economía estadounidense. Además, estuvo el director ejecutivo de Google, Eric Schmidt, aunque la mayor atención la centró Jobs, que en enero se retiró por tiempo indeterminado de su puesto y de la vida pública por motivos de salud.
Carney no confirmó la lista de los presentes, pero los medios estadounidenses indicaron que en el encuentro en la casa del empresario John Doerr, de la firma de inversiones Kleiner Perkins Caufield & Byers, participaron además Carol Bartz de Yahoo, John Chambers de Cisco, Dick Costolo de Twitter y Larry Ellison de Oracle.
En los blogs se comentó, sin embargo, que no había sido invitado Steve Ballmer, de Microsoft, empresa cuya sede está en Redmond, cerca de Seattle (estado de Washington), pero que también cuenta con numerosas instalaciones en California.
También extrañó que no estuviese el CEO de Hewlett Packard, Léo Apotheker, pese a que esta empresa fue la que inició la historia de éxitos de Silicon Valley. Carney se limitó a resumir que el presidente habló con 12 dirigentes del sector sobre innovación y creación de empleo.