El presidente estadounidense, Barack Obama, sigue oponiéndose a una extensión de corto plazo del límite de endeudamiento del país, que considera que podría llevar a una rebaja de la nota crediticia soberana, afirmó la Casa Blanca el sábado.
"El Congreso debería abstenerse de entrar en juegos políticos irresponsables para nuestra economía. Por el contrario, debería ser responsable con su trabajo, evitar una moratoria y recortar el déficit", estimó el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, en un comunicado emitido tras la reunión entre Obama y los líderes del Congreso.
El Congreso tiene plazo hasta el 2 de agosto para alcanzar un acuerdo que permita elevar el límite de deuda de US$14,3 billones y así evitar que el país caiga en una cesación de pagos.