"Los cristianos somos falibles, somos humanos, débiles (…) ¿Puede imaginarse luchando con todos? Bueno, el hombre necesita también reponerse un poquito". De esta manera, el sacerdote Bernard Werth, quien hoy celebró la misa de mediodía en la Catedral de Osorno, ante cerca de 100 personas, justificó la ausencia del obispo de la diócesis, Juan Barros.

Con un argumento similar se explicó que el jefe de la Iglesia osornina tampoco asistió el día anterior a la masiva y tradicional Fiesta de San Sebastián, en la localidad Purranque.

Durante la semana, el controvertido obispo estuvo en el centro de la polémica, tras ser apoyado por el Papa Francisco ante las críticas de un grupo de laicos de la ciudad, quienes lo vinculan a Fernando Karadima. Ante la consulta de por qué no estaba en las celebraciones litúrgicas del fin de semana en Osorno, el sacerdote Werth dijo: "No tengo idea, yo no soy secretario de él".

Tras la misa, Sonia Kauac, asistente a la Catedral, dijo que "aquí la gente que viene a la iglesia es porque está con el obispo, porque es cristiana. Queremos paz".

En las afueras del templo no se registraron manifestaciones de ningún tipo. Ricardo Torres, residente del sector, opinó que "viendo cómo estaba toda la situación. Barros debió haberse marginado, porque hoy día se está hablando más de él que de lo que dijo el Papa".

En Purranque, Jorge Gómez, párroco del sector, subrayó que lo importante de la jornada del fin de semana es el hecho de que haya llegado mucha gente católica.

En relación con la ausencia del obispo Barros y si esperaba que llegara, como era tradicional, año tras año, aseguró que "él tiene su propia agenda y yo no voy a entrar en eso; no hubo una comunicación, entonces no, no lo esperábamos".

Prelado de Iquique

Hoy el obispo de Iquique, Guillermo Vera, reiteró que "él (Papa) ya ha hablado claramente sobre todo esto. Tiene comisiones trabajando. Por lo tanto, cuando el Papa dio una opinión sobre monseñor Barros, él tendrá elementos de juicio para haber dicho lo que dijo. A nosotros nos corresponde escuchar al Papa y hacer lo que él nos pide".

"La primera víctima"

Hoy por la mañana, en tanto, en el programa "Estado Nacional", de TVN, el sacerdote jesuita Fernando Montes expresó que "el tema de los abusos sexuales opacó la visita del Papa".

Respecto del prelado de Osorno, opinó que "él (Barros) dice que no vio (los abusos); me parece que es tan absolutamente inverosímil que no haya visto, que lo encuentro raro, pero aun así yo digo que es la primera víctima, ciertamente de abuso de conciencia, de generar un estado de encierro donde la gente no piensa, no mira, no habla".

Sobre las decisiones que ha tomado el Pontífice en relación con la diócesis de Osorno, y lo ocurrido en la semana, Montes sostuvo que "lo que encuentro delicado es, dado lo que significa Karadima en Chile para la Iglesia, la poca finura a la hora del nombramiento, porque era previsible que se generara un problema".