Los sangrientos enfrentamientos en el Maidán, la plaza de Kiev, que causaron más de 100 muertos y el cambio de poder en Ucrania, son el hilo conductor de una muestra que expone en Moscú objetos auténticos empleados en los choques e impactantes fotografías.
"El objetivo de la exposición es denunciar el horror del derramamiento de sangre, de los asesinatos", dijo a Efe Alexandr Zhitenov, comisario de la muestra, que combina grandes imágenes de carácter casi bélico con los artefactos utilizados en los violentos choques.
Escudos empleados por los efectivos de seguridad del Maidán, cascos de los policías antidisturbios, chalecos antibalas de fabricación casera, balas, cadenas, barras de hierro, restos de bombas molotov, uniformes policiales quemados, un lanzador de fuegos artificiales o una horca convertidos en armamento son algunos de los objetos presentes en la muestra.
La exposición llamada "Pruebas materiales", se hizo en colaboración con el diario Zhurnalitskaya pravda, cuyos periodistas ayudaron en la recolección de artefactos, para la muestra que permanecerá en el Museo de Moscú hasta el 22 de abril.
Zhiteniov subraya que todos los objetos expuestos salieron del Maidán y que estarían dispuestos a certificar su autenticidad mediante exámenes forenses "si alguien tuviera alguna duda".
"En algunos casos fue muy difícil conseguirlos y sacarlos de Ucrania, muchas veces fue a cambio de bastante dinero, en otras ocasiones fueron cedidos por sus protagonistas, como en el caso de un uniforme policial y varios cascos", señala.
La muestra destila una innegable propaganda de la posición rusa respecto a lo acaecido en Kiev, que se califica de golpe de estado fascista y se ilustra con imágenes de caos y destrucción, "guerrilleros del Maidán" en plena acción y pies de fotos alusivos a la incuestionable "preparación bélica" de los luchadores.
Uno de los objetos estrella es el casco ensangrentado de un policía fallecido: "se trata de un objeto único. Es el casco de una persona fallecida. Lo pudimos conseguir después de grandes dificultades, no puedo revelar el canal porque esta gente todavía trabaja en los servicios de seguridad. Pero lo conseguimos a cambio de bastante dinero", señala a Efe el comisario de la muestra.
"Lo que tiene de único es que es una prueba clara de que los asesinatos de la gente no los llevaron acabo los Berkut (antidisturbios)", agrega, mostrando los agujeros de bala que atraviesan el casco, y dando detalles sobre sus trayectorias.