Ocho personas fueron detenidas y 76 resultaron heridas durante un enfrentamiento entre los integrantes de la llamada "Marcha Negra", de mineros del carbón, con la policía en Madrid.
Los mineros, que llevaban cascos y empuñaban bastones, para protestar por un recorte del 63% en los subsidios a las empresas mineras impuesto por el gobierno de Mariano Rajoy, se enfrentaron a los agentes a su llegada al Ministerio de Industria, donde lanzaron proyectiles y piedras a los furgones que blindaban la sede ministerial.
Tras más de dos horas de recorrido, los mineros llegaron al ministerio y se concentraron alrededor de las vallas que rodeaban el perímetro, donde lanzaron proyectiles gritando: "el enemigo está dentro" y "no somos terroristas, somos mineros".
Cuatro columnas de mineros de Asturias, Castilla y León y Aragón, regiones de la mitad norte del país, abrieron la multitudinaria manifestación contra los grandes recortes en los subsidios del sector, que discurrió por el Paseo de la Castellana en Madrid.
Durante la marcha se gritaron pocas consignas, ya que el ruido de los fuegos artificiales que se lanzaron a su paso por la principal avenida de Madrid, sólo fue interrumpido cada vez que los mineros cantaban el himno "Santa Bárbara bendita".
Los mineros, que caminan desde hace 18 días desde las regiones mineras del norte y el este, fueron recibidos como héroes la noche del martes en una marcha que llegó hasta la Puerta del Sol, una de las principales plazas madrileñas.