Los poderes especiales para legislar por decreto del presidente venezolano Nicolás Maduro, solicitados para hacer frente a las "agresiones" de Estados Unidos, entraron en vigencia hoy y hasta el 31 de diciembre.
La llamada Ley Habilitante "antiimperialista", aprobada por la mayoría oficialista en la Asamblea Nacional (Congreso), fue publicada en la Gaceta Oficial, el órgano de divulgación de decisiones gubernamentales, lo que formaliza su entrada en vigor.
La ley habilita a Maduro a legislar por decreto durante casi nueve meses, lo que significa que el gobernante ostentará los poderes especiales en medio de la campaña proselitista para las elecciones legislativas, que se realizarán posiblemente a fines de 2015.
Maduro solicitó la ley para tomar acciones a fin de "proteger" al pueblo venezolano de las "amenazas" de Estados Unidos, luego de que la Casa Blanca aprobara un decreto presidencial con sanciones a siete funcionarios venezolanos acusados de violaciones de los derechos humanos y de que además declarara a Venezuela una "amenaza inusual" para la seguridad estadounidense.
Los poderes especiales fueron aprobados el domingo en una segunda discusión en la Asamblea, con el rechazo de la bancada opositora. Maduro la solicitó por seis meses y el oficialismo la extendió hasta casi nueve meses.
La Ley Habilitante señala que Maduro tendrá autorización para dictar decretos en temas sobre libertad, igualdad, justicia y paz internacional, independencia, soberanía, inmunidad, integridad territorial y autodeterminación nacional.
Estos aspectos se relacionan con el refuerzo para garantizar la soberanía, la protección contra la injerencia de otros Estados en asuntos internos del país y acciones belicistas, entre otros.
También comprende normas dirigidas al fortalecimiento de alianzas estratégicas de Venezuela con países hermanos.
Esta es la segunda Ley Habilitante que obtiene Maduro, quien cumplirá dos años en el poder el 19 de abril. La anterior la solicitó con el argumento de luchar contra la corrupción y contra lo que llamó una "guerra económica" que supuestamente lanzaron empresarios que acaparaban mercancías.
El presidente dijo que la ley le dará herramientas para defender al pueblo de las amenazas imperialistas de Estados Unidos.
La oposición rechazó la legislación en la Asamblea, señalando que el gobierno no necesita más poderes, al tiempo que alertó sobre una eventual nueva arremetida contra la disidencia política.