Nerviosa. Así está Ogla Jerono Kimaiyo en la terraza del hotel donde se hospeda junto al resto de atletas keniatas que vienen con ella. Posa para un par de fotos de la marca que la trajo hasta Santiago, pero sigue muy inquieta.

Veintiocho años tiene la corredora que se quedó con el primer lugar de los 42 kilómetros de la Maratón de Santiago en 2016 y que vuelve este año para defender el título, además de bajar su marca.

"Volví a Chile y a la Maratón de Santiago para poder bajar mi marca. Me gusta la organización de esta maratón, nos hace sentir muy bien", cuenta Ogla.

La africana asegura haber entrenado desde enero para poder llegar en las mejores condiciones a competir. "Esta maratón es muy parecida a otras, pero el terreno es más plano. Eso lo hace ser mucho más calmada. Además, el clima no es muy distinto. En Chile hace más calor y es más húmedo que Kenia, pero no hay diferencia al momento de competir", indica.

"Si no gano volveré a entrenar más duro a Kenia", dice la tímida atleta que también ha competido en Colombia, ganado cuatro veces la media Maratón de Medellín.

"Esta es una muy buena maratón. Ya la gané y por eso es importante, pero regreso este año para poder bajar mi marca. Ese es mi objetivo acá. Solo el tiempo lo dirá. Estoy nerviosa, porque no sé qué pasará. Creo que esta edición es muy competitiva", finaliza Ogla.