La universidad de Connecticut publicó un estudio que demuestra que una baja ingesta de líquido conlleva la disminución del rendimiento cognitivo, provocando un aumento de errores en la vigilancia visual y una respuesta tardía en la memoria a corto plazo.

El estudio realizado por científicos del Laboratorio de Rendimiento Humano de Dallas, se realizó sobre una muestra de 26 hombres de 20 años, quienes fueron sometidos a diferentes pruebas deportivas en condiciones de deshidratación, con el objetivo de comprobar la respuesta de su cerebro ante una ausencia moderada de líquidos en su organismo.

Una leve deshidratación, sin aumento de la temperatura corporal, provocó que los hombres cometieran más errores en las pruebas y que disminuyera su atención visual. Además, aumentaron los indicadores de fatiga, tensión y ansiedad, los cuales pueden influir negativamente en el estado de ánimo.

Los efectos de la deshidratación también se vieron en estado de reposo.

PRECAUCIONES

Gisselle Muñoz, nutricionista de Clínica Las Condes, reafirma lo importante que es mantenerse hidratado, para esto recomienda beber líquidos constantemente y no esperar a sentir sed, ya que cuando esto ocurre el cuerpo está bajo una leve deshidratación.

"Un adulto debiera beber entre 2 y 2.5 litros de líquido al día, además del que aportan los alimentos. Muchos dolores de cabeza y fatigas provienen simplemente de la falta de agua en el organismo, por lo que es necesario incorporar el hábito de la hidratación en nuestras vidas", explica la nutricionista.

"Es importante también que consideremos que, además del agua, todos los líquidos suman: el té de la mañana, el café después de almuerzo, bebidas (preferentemente sin azúcar) y la sopa, por ejemplo", agrega.

Por otra parte, el Dr. Emilio Sudy de la Clínica Vespucio, afirma que las frutas también son muy importantes para mantenerse hidratado y recomienda comer sandía y melón durante estos días de calor.