Desde afirmaciones como "se ve gorda, chica y antigua" hasta halagos como "divina" recibió Soledad Onetto sobre su look durante la época festivalera.

Sin embargo, a la hora de elegir entre todas las personalidades que destacaron por su acertado vestuario en la celebración de los 50 años del Festival de Viña del Mar, los diseñadores top de Santiago se inclinaron por la periodista de Canal 13 y las creaciones de alta costura que escogió para subir al escenario de la Quinta Vergara.

"Soledad se vio espectacular todos los días, hubo un acierto en la elección de sus trajes de alta noche y ella los llevaba muy bien, parecía como que hubiera nacido con ellos", destacó Jaime Troncoso, argumentando que la rubia de Canal 13 le dio el toque de glamour al espectáculo.

"Estuvo bien, bastante a la altura del certamen aunque en algunas ocasiones salió con diseños que yo no se los habría puesto", opinó José Cardoch cuyos vestidos estuvieron ausentes en la tradicional gala del certamen que anualmente se realiza en uno de los salones del Casino de Viña del Mar.

"En general ella (Onetto) se vio muy bien, elegante y sofisticada, y a pesar de su poca estatura y lo alto que es Felipe Camiroaga, se vio muy distinguida", agregó Ricardo Oyarzún, recalcando que "la altura en el escenario no lo da la matemática, sino la postura artística y la actitud".

Mientras, Miguel Angel Guzmán, aunque no alabó del todo los vestidos de la nueva anfitriona del evento viñamarino, sí destacó algunos modelos como el traje púrpura de la colección de Alexander Mcqueen. "Fue el mejor que le quedó, me gustó mucho", comentó. Y añadió: "Me imaginé que la noche final ella iba a mostrar dos grandes piezas importantes de colección, pero siento que se quedó pobre. Creo que Sole partió muy bien en la jornada inaugural  y empezó a decaer con el paso de los días".

PIERO, "FATAL"
Pero no todo fue glamour y elegancia. Varios invitados al Festival se lucieron por no vestir adecuadamente o como lo amerita la fiesta de la música más importante del país.

Troncoso, Guzmán, Cardoch y Oyarzún coincidieron en el mal gusto del cantante Piero, quien asistió al certamen como miembro del jurado.

"Desubicado total con su ropa tan hippie, ahora que está de moda el 'hippie chic' podría haber usado una chaqueta de mezclilla, como mínimo. Tiene que haber un respeto por el público, si te están pagando bastante por asistir al evento, invierte un poco en tu imagen", comenta Troncoso.

A lo que Guzmán agrega: "Una cosa es ser alternativo y otra tienen que ver con las buenas costumbres y ser políticamente correcto. Creo que la situación ameritaba un buen vestir".

"Está bien que sea un intelectual y que no se preocupe de lo frívolo, pero un escenario como la Quinta Vergara merece respeto y llegar lleno de colores y con corbatas del Tony Caluga es cero glamour. Fue la nota freak del festival", afirmó Oyarzún.

Cardoch, por su parte, definió el vestuario del artista italiano como "fatal", explicando que "el jurado tiene que proyectar una imagen de seriedad y de cierto nivel, tiene que destacarse del resto del público, está obligado a tener un presencia digna".