La semana pasada, la PDI desbarató una organización internacional e incautó 4.000 dosis de drogas sintéticas, entre ellas una nueva sustancia sicotrópica llamada 2CB y éxtasis. Los últimos análisis internacionales dan cuenta de que esta droga también es consumida por estudiantes secundarios. Así lo reveló la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en su último reporte sobre el uso de estupefacientes de tipo anfetamínico en América Latina en jóvenes de entre 13 y 18 años, donde Chile ocupa el segundo lugar en relación a la tasa de consumo anual.

De acuerdo al informe, el primer puesto en el listado lo obtiene Argentina, con un 1,4% (de estudiantes que dicen haber consumido la droga en un año), le sigue Chile con un 1,3% y en el tercer puesto se encuentran Perú y Panamá, con un 1% (ver infografía).

Estas cifras provienen de datos oficiales de las encuestas que se hicieron por última vez en cada uno de estos países.

En el caso de Chile, se tomó en cuenta el Noveno Estudio Nacional de Drogas en Población Escolar de 2011. "Resalta el caso de Chile, que tiene un nivel de consumo entre los estudiantes secundarios que está dentro de los más altos de los países de Latinoamérica", sostiene el coordinador regional del programa Smart   de la ONU, Juan Carlos Araneda, quien fue uno de los autores de este estudio.

El sicólogo indica que pese a que los niveles de uso de esta droga no son tan altos en relación a la cantidad de estudiantes, estos "no están tan lejos del consumo de cocaína que declaran los escolares". Para Felipe Leyton, jefe nacional del área de prevención del Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol (Senda), este resultado es alarmante, pero la comparación con los otros países de la región debe ser mesurada.

"Es sumamente preocupante estar en el segundo lugar, sobre todo porque es en población escolar, que por la fase de desarrollo en la cual se encuentran, cualquier consumo es mucho más negativo que en los adultos", dice Leyton. Y agrega: "La comparatividad misma de los estudios entre países no puede ser tan lineal y hay que tomarlos (los resultados) con mesura. Esto porque se usan metodologías distintas en cada uno de los informes entregados por los países". Tras la publicación de este estudio, el Senda evalúa realizar un reporte específicamente sobre el consumo de éxtasis. "Estamos viendo si lo hacemos con población especial, ya que esta es una droga de nicho, y así ver cómo se comporta el fenómeno", señala Leyton.

INCAUTACIONES

Pese a que la cantidad de dosis incautadas de esta droga desde 2001 a 2013 va a la baja, en los últimos años "se observa un renacer, pero que no alcanza a ser relevante en términos de enfoque de persecución". Así lo señala el jefe de la Unidad de Drogas de la Fiscalía Nacional, Jorge Valladares.

Según cifras del Ministerio Público, mientras en 2007 se alcanzó un peak de 4.759 dosis decomisadas, en 2013 se incautaron apenas 203.