Al menos 365 personas han muerto por la violencia postelectoral en Costa de Marfil desde diciembre confirmó hoy la Operación de Naciones Unidas (ONUCI), que ha advertido de que aumenta el riesgo de que se reanude la guerra civil que dividió el país de 2002 a 2007.

El director de Derechos Humanos de la ONUCI, Guillaume Ngefa, confirmó también la muerte de siete mujeres que participaban en una manifestación pacífica a favor de Alassane Ouattara en el barrio de Abobo de Abiyán, por disparos de las Fuerzas de Defensa y Seguridad (FDS) de Laurent Gbagbo.

Seis de la mujeres murieron en el lugar y una más en el hospital al que fue trasladada, según recalcó Ngefa, quien agregó que unas 50 personas han perdido la vida en los combates entre las FDS y las Fuerzas Nuevas que respaldan a Ouattara en la última semana.

La ONU también investiga la supuesta existencia de fosas comunes con los cuerpos de cientos de personas secuestradas por milicianos y mercenarios del bando de Gbagbo y el destino de otros desaparecidos.

Por su parte, el portavoz de la ONUCI, Hamadoun Touré, ha anunciado que está tratando de abrir un corredor humanitario en Abobo, junto con la Cruz Roja y otras agencias asistenciales, para suministrar artículos de primera necesidad y ayuda médica a los vecinos del barrio y permitirles que puedan entrar o salir.

Hoy mismo, Amnistía Internacional (AI) señaló en un comunicado que la situación humanitaria en Costa de Marfil se ha agravado por la falta de suministros de agua y electricidad, no sólo en áreas de Abiyán, sino también en gran parte del centro, norte y oeste del país desde principios de esta semana.

La propia compañía marfileña de electricidad, según AI, ha responsabilizado de los cortes a fuerzas leales a Gbagbo, que dijeron suspender el suministro "por motivos de seguridad", lo que ha deteriorado las condiciones de vida e impedido muchas operaciones médicas en zonas que en su mayoría apoyan a Ouattara.

La ONUCI que busca la paz y protección de la población civil, es atacada constanetemente por jóvenes fieles a Gbagbo.

Ouattara fue reconocido ganador de los comicios presidenciales, según los resultados publicados por la Comisión Electoral y certificados por la ONU, pero Gbagbo, que lleva diez años en la Presidencia, no lo admitió y pretende seguir otro quinquenio.