Los paí­ses de las Naciones Unidas no lograron un nuevo tratado que regule el multimillonario comercio mundial de armas mientras que algunos diplomáticos y simpatizantes culparon a Estados Unidos del fracaso de la conferencia de negociaciones que duró un mes.

Se habí­a alentado el optimismo en torno a la posible concertación del acuerdo el viernes, la fecha límite para hacerlo, tras una revisión al contenido del mismo que cerraba lagunas importantes.

Sin embargo, Estados Unidos anunció el viernes que necesitaba más tiempo para considerar el proyecto del tratado. Después Rusia y China también solicitaron más tiempo.

En diciembre de 2006, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó avanzar hacia la concertación de un tratado que regule el comercio de armas, el cual va en aumento, aun cuando Estados Unidos habí­a emtido un voto negativo.

En octubre de 2009, el gobierno del presidente Barack Obama dio marcha atrás a la postura del gobierno de George W. Bush y apoyó una resolución de asamblea para sostener cuatro reuniones preparatorias y una conferencia de cuatro semanas en Naciones Unidas, en 2012, a fin de redactar el tratado para el comercio de armas.

Estados Unidos insistió en que el convenio debí­a contar con la aprobación por consenso de todos los 193 estados que conforman las Naciones Unidas.

El embajador argentino Roberto Garcí­a Moritán, presidente de la conferencia, dijo que los partidarios del tratado sabí­an que "esto iba a ser difí­cil de lograr" y que habí­a algunas delegaciones que no estaban de acuerdo con el tratado pese a que "la abrumadora mayorí­a en la sala sí­".

Agregó que desde el principio de las negociaciones, algunos paí­ses tení­an "puntos de vista divergentes" sobre el convenio, entre ellos Siria, Irán y Corea del Norte.

A pesar del fracaso para la concertación del convenio, Moritán pronosticó que "con toda certeza tendremos un tratado en 2012".

Señaló que hay varias opciones para lograr un avance en la Asamblea General y serán consideradas en el tercer trimestre, antes de que la nueva sesión del organismo mundial inicie en septiembre.

El comercio internacional de armas, que alcanza 60.000 millones de dólares anuales, carece de regulación, aunque Estdos Unidos y otras naciones tienen sus propias normas que rigen sus exportaciones en el sector.