El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, dijo que el organismo mundial mantendrá su determinación, a pesar del ataque ocurrido hoy contra una pensión en Kabul en el que murieron cinco miembros del personal extranjero de la ONU y muchos otros resultaron heridos.
"Condeno este impactante y desvergonzado acto y a los terroristas que cometieron este crimen", dijo Ban.
"Es injustificable desde todo punto de vista (...) Nunca nos van a desalentar estos ataques terroristas (...) Vamos a seguir trabajando, sobre todo ayudando al gobierno y al pueblo afgano a llevar a cabo la segunda elección presidencial", agregó.
Ban dijo que los procedimientos de seguridad de la ONU serán revisados y reforzados.
Los talibanes han prometido interrumpir la segunda vuelta del 7 de noviembre, mientras el Presidente estadounidense Barack Obama considera si enviar más tropas a Afganistán para combatir una insurgencia que ha alcanzado su nivel más feroz en ocho años.
Los talibanes dijeron que atacaron la pensión por el rol que está teniendo la ONU en la organización del balotaje. Baninformó que había al menos 25 empleados de la ONU en la pensión en el momento del ataque.
Naciones Unidas dijo inicialmente que seis extranjeros miembros de su personal habían muerto, pero posteriormente corrigió la cifra a cinco. Agregó que nueve resultaron heridos.