El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, instó al gobierno de Israel y a la milicia radical Hamas a realizar "investigaciones nacionales creíbles" sobre la posible comisión de crímenes de guerra durante el conflicto de Gaza de principios de año, dijo hoy un alto cargo de Naciones Unidas.

"El secretario general de la ONU insta a todos los bandos a llevar a cabo sin retrasos investigaciones nacionales creíbles sobre su conducta en el conflicto", dijo el subsecretario general de la ONU para Asuntos Políticos, Lynn Pascoe, al Consejo de Seguridad.

El alto responsable de Naciones Unidas fue el encargado de abrir una reunión del Consejo de Seguridad del organismo sobre el informe Goldstone, que acusa a israelíes y palestinos de haber cometido posibles crímenes de guerra durante los combates de diciembre y enero pasados en el territorio palestino.

El informe encargado por el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas recomendó al organismo mundial que instara a los dos bandos a investigar sus actuaciones, bajo la amenaza de trasladar el caso a la Corte Penal Internacional (CPI).

Pascoe reiteró el respaldo del secretario general a las recomendaciones del comité encabezado por el jurista sudafricano Richard Goldstone.

"Como el secretario general ha dicho multitud de veces, la paz y la justicia son caras de la misma moneda", apuntó el subsecretario general de la ONU, quien recordó que Ban considera que el derecho internacional y la protección de la población civil son principios que deben respetarse "en toda situación y circunstancias".

Asimismo, resaltó que Ban espera que las instituciones de la ONU y sus países miembros alcancen un consenso sobre cómo proseguir en este asunto.

El Consejo de Derechos Humanos de la ONU, con sede en Ginebra, se reunirá el jueves para decidir si respalda el contenido del informe, con lo que podría emplazar al Consejo de Seguridad a poner en práctica sus recomendaciones.

El comité encabezado por Goldstone analizó los 23 días de la ofensiva "Plomo Fundido", que causó la muerte de unos 1.400 palestinos, en su mayoría civiles y más de una quinta parte de ellos menores, según recuentos hospitalarios locales y de ONG israelíes, palestinas e internacionales.

En sus conclusiones recomendó al Consejo de Seguridad que inste a Israel y a las autoridades palestinas a lanzar sendas investigaciones y procesar judicialmente a los responsables de haber cometido acciones criminales.

En caso de que las dos partes incumplan el mandato del máximo órgano, este debería referir el caso a la fiscalía de la Corte Penal Internacional, de acuerdo con el documento.