La Misión de Respuesta de Emergencia al Ebola de las Naciones Unidas (Unmeer), solicitó a la comunidad internacional ser cuidadosos al implementar medidas como cuarentena obligatoria, a los misioneros y personal de la salud que regresa de Africa occidental tras trabajar contra el virus ébola, ya que podría disuadir a las personas de no ir más.
"Cualquier cosa que disuada a personal extranjero formado de venir a África Occidental y unirse a nosotros en el frente contra el ébola sería muy, muy desafortunada", dijo el jefe de dicha misión, Anthony Banbury, a Reuters.
La postura del organismo internacional se da después que una enfermera de New Jersey, fuera puesta en aislamiento preventivo en Estados Unidos, tras llegar al aeropuerto de Newark desde Sierra Leona, pese a no tener síntomas de la enfermedad.
La mujer, identificada como Kaci Hickox, finalmente fue autorizada a seguir la cuarentena en su casa, en el estado de Maine donde se supervisará su estado de salud.