La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) acordó este miércoles el primer recorte a su oferta de petróleo desde 2008, luego de que Arabia Saudita aceptara un gran golpe a su producción y retirara la exigencia de que Irán redujera el bombeo.

Rusia, que no pertenece a la organización, se unirá a los recortes por primera vez en 15 años con una rebaja de hasta 300.000 barriles por día en el primer semestre del 2017 para ayudar al grupo a impulsar los precios del crudo.

Los futuros del crudo Brent escalaron más de 9% por encima de los US$50 por barril luego de que Riad alcanzara un compromiso con Irán y después que Irak, que ha aumentado rápidamente su producción, también acordara reducir su creciente bombeo.

"La OPEP demostró a los escépticos que no esta muerta. La medida acelerará el reequilibrio del mercado y erosionará el exceso de oferta mundial de petróleo", dijo Amrita Sen, de la consultora Energy Aspects.

Antes de la reunión, el ministro de Energía de Arabia Saudita, Khalid al-Falih, dijo que el reino estaba preparado para aceptar un gran golpe sobre la producción para alcanzar un pacto.

"Creo que es un buen día para el mercados del petróleo, es un buen día para la industria y (...) debería ser un buen día para la economía mundial. Creo que será un impulso para el crecimiento económico global", aseguró Falih a periodistas tras la decisión.

El grupo de 14 países produce un tercio del petróleo mundial, alrededor de 33,6 millones de barriles por día y bajo el acuerdo del miércoles reduciría el bombeo en alrededor de 1,2 millones de barriles a partir de enero del próximo año.

Arabia Saudita realizará los mayores recortes al reducir el bombeo en casi 500.000 barriles a 10,06 millones de barriles. Sus aliados en la OPEP Emiratos Arabes Unidos, Kuwait y Qatar lo rebajarán en un total de 300.000 barriles.

Irak, que insistió en tener una mayor producción para financiar su combate contra el Estado Islámico, acordó inesperadamente rebajar la extracción en 200.000 barriles.

A Irán, en tanto, se le permitió aumentar levemente su producción desde los niveles de octubre, una importante victoria para Teherán, que por largo tiempo ha argumentado su necesidad de ganar participación de mercado que perdió bajo sanciones de Occidente.

Los enfrentamientos entre Irán y Arabia Saudita habían dominado las reuniones previas de la OPEP.

"Si este acuerdo se lleva a cabo, sería enorme. Se quita mucho petróleo del mercado y se obtiene la participación rusa", dijo Gary Ross, un veterano observador de la OPEP y fundador de la consultora Pira, quien aseguró que el precio del barril de crudo podría subir a US$55 por barril.

Qatar, que preside la OPEP, dijo que los productores fuera del cartel acordaron reducir su bombeo en otros 600.000 bpd, con Rusia contribuyendo con 300.000 bpd.

Una reducción combinada de 1,8 millones de bpd por parte de países de la OPEP y de los que no integran el grupo representa casi un 2% del bombeo mundial y ayudaría al mercado a limpiar un exceso de existencias, que llevó a los precios a hundirse desde niveles de US$115 vistos a mediados del 2014.

La OPEP sostendrá reuniones con países que no pertenecen al grupo el 9 de diciembre. La organización también realizará su próximo encuentro el 25 de mayo para supervisar el acuerdo y podría extenderlo por seis meses, dijo Qatar.