Hace dos semanas, el Ministerio de Transportes ingresó al Congreso un proyecto de ley para aumentar el subsidio del Transantiago en $ 60 mil millones para los próximos tres años y en $ 130 mil millones para el período 2018-2022. De esta manera, el Ejecutivo busca evitar un alza de $ 30 en el precio del pasaje.
Ante este escenario, la Asociación de Concesionarios del Transporte Urbano de Superficie (Actus), entidad que reúne seis de las siete empresas operadoras del sistema, estima que la medida sólo serviría para paliar el déficit existente, pero no para mejorar el servicio.
Según un estudio elaborado por la agrupación, al que tuvo acceso La Tercera, el presupuesto establecido por la ley del subsidio para el Transantiago fue de $ 400.155 millones el año pasado. Sin embargo, los pagos que el sistema realizó para cubrir el pase escolar y los transbordos (donde el segundo y tercer viaje son gratuitos) fue de $ 429.372 millones, lo cual generó un déficit de $ 29.217 millones.
Debido a las cifras negativas, el informe de Actus asegura que el Estado recurrió a los recursos remanentes del sistema, que se mantenían en la denominada "Cuenta 5", que es el fondo de contingencia. Desde ahí se retiraron $ 31.500 millones que fueron utilizados para suplir el déficit.
"Lo que concluye el estudio es que hoy día el subsidio que existe, de $ 400 mil millones, no alcanza ni siquiera para cubrir los dos subsidios principales del sistema, el de los estudiantes y de los transbordos y, por lo tanto, ellos se terminan financiando con recursos operacionales del sistema, recursos que salen de los buses y de Metro", sostuvo el director ejecutivo de Actus, Víctor Barrueto.
Respecto al proyecto que busca aumentar el subsidio, Barrueto aseguró que "resuelve el déficit de las actuales condiciones y desestresa financieramente el sistema. Sin embargo, no permite ir a una discusión respecto al mejoramiento significativo de la calidad y el nivel de servicio que queremos darle al usuario".
Otro dato que se desprende del estudio es que cada vez que un usuario paga la tarifa actual de buses y realiza un transbordo, en realidad su viaje cuesta al sistema unos $ 950. De ellos, el Estado financia alrededor de $ 310 (32,6% del valor) por cada persona que se moviliza.
El informe además asegura que, en el escenario hipotético de que no existiera subsidio a los estudiantes ni a los transbordos, y los usuarios debieran pagar la totalidad del pasaje, el ingreso potencial del sistema sería de $ 1.024.753 millones. Considerando que el costo del sistema que se estima en $ 980.992 millones, generaría un eventual superávit operacional.
En esta línea, según estimaciones de Actus, el subsidio requerido para el Transantiago, incluido buses y metro, es de $ 473.568 millones, es decir, $73.413 más que los $ 400.155 millones señalados en la ejecución presupuestaria del Ministerio de Hacienda el año pasado. La cifra, además, es mayor a los $ 60 mil millones que se destinaría en los próximos tres años de aprobarse el aumento del subsidio.
Según el experto en transporte de la U. de Chile, Leonardo Basso, la mayoría de los países del mundo tienen grandes subsidios al transporte público. "En Chile, aunque aumente el subsidio sigue siendo bajo en comparación a lo que se usa en otros países donde las cosas funcionan bien, pero ese aumento debería ir de la manos con cambios en el desempeño, porque hasta ahora los operadores privados no han operado bien", estimó.
