Molestia  causaron en la oposición los dichos del ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo sobre el vínculo laboral del subsecretario de la Segegob, Rodolfo Baier, con Soquimich (SQM).

"Paremos la caza de brujas, respetemos la honra de las personas", afirmó el jefe de gabinete el martes en una vocería que buscaba defender al periodista y agregó que "no queremos un país que comienza a perseguir a las personas por filtraciones".

Si bien la oposición comparte el fondo de las palabras de Peñailillo, criticaron la oportunidad -ahora que aparecen funcionarios de gobierno mencionados-, pues cuando estalló el caso Penta y su vinculación con parlamentarios gremialistas, el Ejecutivo optó por no tomar en cuenta las críticas a las filtraciones del caso.

"Si retroceden la casetera en el tiempo o rebobinan los videos se darán cuenta que nosotros ese discurso no lo hemos modificado. No por el hecho que hoy aparezcan nuevos antecedentes, que hablen de que acá estamos en una situación donde la clase política está puesta en cuestionamiento, nosotros nos vamos a hacer cómplices de esa cacería de brujas o de cambiar en una coma nuestro discurso", afirmó el presidente interino de la UDI, Javier Macaya.

En esa misma línea, el diputado RN Nicolás Monckebreg señaló que "esta actitud incoherente demuestra la improvisación del gobierno y el oportunismo con que han enfrentado los casos de corrupción".

"Cuando estalla el caso Penta, el gobierno fue el primero en rasgar vestiduras y enjuiciar a los parlamentarios de oposición afectados. Pero cuando la corrupción les estalla en la propia Moneda y en la Nueva Mayoría, exigen calma e invocan la presunción de inocencia", dijo Monckeberg.

A juicio del legislador el Ejecutivo "se pone el parche antes de la herida" frente a lo que se pueda destapar en el caso SQM.

A su vez, el timonel de Evópoli, Felipe Kast, no se mostró sorprendido por el actuar de Palacio: "El doble estándar se vio desde el inicio, con el tratamiento que se le dio a un ministro, que estaba en una situación similar al resto y el juicio que se le hizo a los parlamentarios involucrados de la UDI".

Con todo, ayer la Presidenta Michelle Bachelet salió a enmendar la línea discursiva del gobierno. Junto con reiterar la "instrucción" para que todos los funcionarios de gobierno colaboren con la Justicia, agregó que "se requiere de la máxima transparencia y que los involucrados también puedan ejercer su legítimo derecho a la defensa o, cuando corresponda, asumir las responsabilidades".