La mitad de los 75 opositores cubanos apresados en 2003 agradecieron hoy las gestiones del ministro español de Relaciones Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, en favor de algunos de ellos, pero aseguran que eso no demuestra voluntad de cambio del gobierno que preside el general Raúl Castro.
"Saludamos la excarcelación del hermano Nelson Aguiar, mediante el otorgamiento de una licencia extrapenal, y el permiso para viajar al exterior concedido a dos compatriotas para recibir atención médica", a raíz de la reciente visita de Moratinos a Cuba, dice un comunicado firmado por 37 miembros de ese grupo, algunos aún presos y otros excarcelados por razones de salud.
"Sin embargo, subrayamos que no deben considerarse demostrativos de voluntad de cambios en general del gobierno cubano, que merezcan modificaciones en la política de España y la Unión Europea", añade el documento en alusión al propósito del ministro de eliminar la "posición común" de la UE que irrita a La Habana porque exige democracia y derechos humanos.
"De los 75 condenados, aún 53 permanecemos en infrahumanas condiciones, obligados a convivir con prisioneros comunes de alta peligrosidad y todos con serias enfermedades, la mayoría adquiridas en prisión", recuerdan los opositores.
"Además prosiguen, hay alrededor de 200 prisioneros políticos pacíficos en condiciones similares a las nuestras".
Los disidentes manifiestan "preocupación sobre el cambio de política del actual gobierno de España en relación con la violación de los derechos humanos y la falta de democracia en Cuba".
Añaden que la visita de Moratinos a La Habana hace una semana y su negativa a reunirse con la disidencia interna "es una repetición del menosprecio mostrado hacia nuestra lucha durante su estancia en 2007, cuando con pasividad escuchó a su homólogo de entonces (Felipe Pérez Roque) decir que no existían presos políticos en Cuba".
El comunicado califica esa actitud de "complacencia con el totalitarismo" y sostiene que también ha sido mostrada "por varios altos dirigentes del actual gobierno español en reiteradas visitas a Cuba en los últimos tiempos".
"Las autoridades cubanas, a pesar de sus promesas, no han dado ningún paso para hacer avanzar la democracia y el respeto de los derechos humanos", afirman los opositores.