Con las réplicas de la fiscalía, querellante y defensa, hoy concluyó el juicio oral que se extendió por más de dos meses, en contra del sacerdote John O'Reilly, acusado por dos delitos de abuso sexual a menores, ex alumnas del colegio Cumbres de Las Condes.
Tras los alegatos, el imputado decidió mantener su derecho a guardar silencio, luego que el magistrado le concediera la última palabra.
El abogado defensor del religioso, Luis Hermosilla, manifestó que el acusado debe ser absuelto de las imputaciones, pues insistió en que el relato de las dos presuntas víctimas fue inducido, de manera que hoy ambas aluden a "una falsa memoria".
Además, dijo Hermosilla, el ministerio público argumentó en sus alegatos, un testimonio parcial de quienes expusieron durante el juicio, el que, según el defensor, "se descontextualiza y no se da valor a todo lo que ellos dijeron".
El abogado reiteró que la acusación contra el sacerdote se sostiene sólo en el relato de las hermanas, hecho que refutó el abogado representante de la familia de las presuntas víctimas, José Ignacio Escobar.
"Hay relatos que son consistentes y contundentes de parte de las menores, no sólo ante la fiscalía, sino que también en el Cavas y ante el tribunal. Hay una gran cantidad de otras pruebas que le dan contenido a las declaraciones y que permiten descartar, además las teorías que puedan explicar algún posible complot", dijo Escobar.
El Tercer Tribunal Oral en Lo Penal resolverá mañana a las 11 horas la inocencia o culpabilidad del acusado, para quien la fiscalía pide 20 años de cárcel, una pena, que para su defensor, significa "una condena de muerte".