Un hombre armado mató a tiros a 50 personas e hirió a otras 53 en la madrugada del domingo en un club nocturno gay de Orlando antes de ser abatido por la policía, dijeron el alcalde y la policía de la ciudad, en lo que autoridades describieron como un "acto de terrorismo".
El atacante fue identificado como Omar S. Mateen, un hombre que según un agente del FBI puede haber tenido inclinaciones hacia militantes de Estado Islámico. No obstante, funcionarios advirtieron que el vínculo debía ser investigado más.
El ataque armado, según la cifra de fallecidos entregada a los periodistas por el alcalde de Orlando, Buddy Dyer, sería el más mortal en Estados Unidos, superando a la masacre de 2007 en la Universidad Virginia Tech, que dejó 32 muertos.
Un oficial de la policía que trabajaba como guardia de seguridad en el interior de la discoteca Pulse, que funciona en el centro de Orlando desde 2004, intercambió disparos con el sospechoso a eso de las dos de la madrugada, dijo la policía.
Rápidamente se produjo una situación con rehenes y tres horas más tarde entró en el local un escuadrón policial que abatió mortalmente al atacante. No estaba claro en qué momento el hombre armado disparó a las víctimas.
"¿Si lo consideramos un acto de terrorismo? Absolutamente, lo estamos investigando desde todos los ángulos como un acto de terrorismo", dijo Danny Banks, agente especial del departamento de seguridad de Florida.
"Si se trata de terrorismo local o internacional, es algo que claramente dilucidaremos", añadió.
Poco antes de anunciar la muerte del atacante, los agentes dijeron que había realizado una "explosión controlada" frente al club, sin dar más detalles.
El incidente comenzó cerca de las 02.00 locales en la discoteca Pulse del centro de Orlando, donde según testigos un hombre abrió fuego con un arma automática.
"Alguien comenzó a disparar. La gente se tiró al suelo", contó uno de los clientes del club, Ricardo Negron, a Sky News.
El testigo dijo haber escuchado "continuos disparos" durante casi un minuto, aunque le pareció mucho más.
La discoteca Pulse de Orlando, que se presenta en su sitio web como "el bar gay más 'hot' de Orlando", colgó en su página de Facebook un último mensaje lapidario: "¡Salgan y corran!".
Las ambulancias convergían hacia el lugar, además de al menos un vehículo de control de crisis.
"Tiroteo en Pulse Nightclub en S Orange. Múltiples víctimas. Manténgase fuera del área", escribió la policía de Orlando en Twitter.
"Hay víctimas. No estoy seguro si hay fallecidos hasta el momento", dijo un vocero policial a la AFP. "Los oficiales van a registrar el lugar y hacer salir a la gente".
El testigo Witness Christopher Hanson dijo que escuchó "fuertes ruidos de disparos. No ví a los atacantes, solamente vi cuerpos cayendo cuando estaba ordenando una bebida en el bar".
"Yo caí y me arrastré hacia afuera. La gente trataba de escapar", dijo Hanson a la cadena CNN, agregando que había "sangre por todas partes".
Rosie Feba estaba con una amiga cuando comenzaron los disparos.
"Ella me dijo que alguien estaba disparando. Todo el mundo se tiró al suelo", dijo Feba al cotidiano Orlando Sentinel. "Le dije que no creía que fuera cierto, pensé que era solo parte de la música, hasta que vi fuego saliendo de su arma".
Se trata del segundo ataque en la ciudad en poco más de 24 horas, luego de que la cantante Christina Grimmie, exconcursante en el show "The voice", fuera asesinada el viernes por un hombre que la atacó al término de un concierto.
La joven fue llevada de urgencia a un hospital pero murió a causa de sus heridas. Su atacante, Kevin James, de 27 años, se suicidó luego de dispararle.
El teatro donde Grimmie fue atacada está situado a unos seis kilómetros del Pulse nightclub.
Las armas de fuego fueron usadas en 11.200 asesinatos en 2013 en Estados Unidos, pero hasta ahora no han llevado a la adopción de medidas efectivas para limitar su uso, en un país donde el derecho a portar armas está protegido por la segunda enmienda de la constitución.