Luego de varios años con pérdidas, Cruzados SADP comienza a rendir como  productor de futbolistas. La última venta millonaria ocurrió hace unos días con el traspaso del atacante Nicolás Castillo al Brujas de Bélgica, por una cifra cercana a los 4 millones de dólares, por el 75% de su pase. Antes de esa transferencia, fue la de Francisco Silva a Osasuna la que dejó un elevado monto en las arcas.

Primero, el conjunto de Pamplona pagó US$ 180 mil por el arriendo del pase y luego hizo efectiva la compra por US$ 1,5 millones.

¿El problema? El "rojillo" no pagó la segunda cuota, cuyo plazo terminó el 15 de diciembre.  Por lo mismo, el elenco ibérico se acercó a la UC para evitar multas y acordaron una nueva modalidad de pago, ante los problemas económicos, que además casi terminan con la expedición del "Gato" en ese país. "Sé que se está abonando de a poco la deuda por Silva. Entiendo que la gerencia ha llegado a un acuerdo con nuestros pares chilenos... Francisco debería quedarse hasta junio, al menos, pues el Guangzhou chino ofreció US$ 2,7 millones y el club pide US$ 4 millones", dice el directivo de Osasuna, Txuma Peralta.

Esta no es la primera vez que la UC se enfrenta a una deuda con un club europeo: en 2012, Cruzados demandó en la FIFA a Genoa. El club italiano adeudaba US$ 250 mil por Lucas Pratto.

En materia futbolística, en tanto, Mark González sería titular por primera vez desde su retorno a Chile.