Su rol fue clave desde el inicio del escándalo. Óscar Fuentes, ex secretario ejecutivo de la ANFP, recibió la instrucción directa de Sergio Jadue de preparar y coordinar su salida del país. Era mayo de 2015, y la detención de altos mandos de la FIFA surgía apenas como la punta del iceberg del alboroto que se avecinaba.
Fuentes, que llegó a la ANFP un par de meses después del inicio del primer mandato de Jadue, a comienzos de 2011, cargaba desde el 4 de octubre de 2013 con toda la responsabilidad legal de la Asociación. En ese contexto, tuvo que gestionar la defensa del directivo calerano, contactar abogados asesores en Chile y, posteriormente, viajar en reiteradas ocasiones a EEUU para coordinar el desembarco del expresidente.
Fue siempre uno de los hombres más cercanos al extimonel. Por eso, las visitas a su oficina se repitieron casi a diario durante toda la administración. Por lo mismo, no extrañó que fuera precisamente Fuentes el encargado de, por ejemplo, negociar por Jadue la venta de su casa en Huechuraba, poco antes de que éste dejara el país. Otros, como Nibaldo Jaque, no tuvieron un rol activo en el plan de escape, ni viajaron con el calerano a Norteamérica, como sí lo hizo Fuentes.
Según la auditoría de Deloitte, Fuentes, junto al abogado José Pablo Forteza y el propio Jadue, compraron, entre mayo y noviembre de 2015, 35 pasajes a EEUU con cargo de la ANFP por $184 millones.
El ex secretario ejecutivo, fanático de Colo Colo, “pero poco futbolizado aunque habilidoso y técnico a la hora de jugar” según quienes trabajaron con él, fue sacado por el actual directorio. Él respondió con una demanda por “despido injustificado”, que sigue sin resolución. Aspira a recibir $ 70 millones más vacaciones y reajustes.