Oscar Isaac llevaba una década como un confiable actor secundario, reconocible de cara, pero no de nombre, con títulos como Drive y Robin Hood a su haber. Y parecía que ese era su destino. En 2012, Tony Gilroy lo había querido para el rol principal en El legado de Bourne, pero el estudio optó por el más conocido Jeremy Renner, mientras que Isaac debió conformarse con un papel terciario, encarnando a uno de los agentes que muere durante el filme. Así, una nueva oportunidad de pasar a la primera línea se había perdido. Hasta ahora. Porque gracias a su papel en La balada de un hombre común, de los hermanos Ethan y Joel Coen, parece estar listo para dar finalmente el salto a las grandes ligas.
Isaac partió el año con una nominación al Globo de Oro como Mejor Actor de Musical o Comedia, y otra para los Independent Spirit Awards, como Mejor Actor. Y aunque el Oscar lo ignoró, la crítica sólo ha alabado su interpretación como el músico al borde del fracaso que intenta encontrar su camino en el Nueva York anterior a la explosión folk en los 60. Isaac contaba con una ventaja particular para el personaje: había sido el cantante de bandas de punk rock y ska durante su juventud en Miami y Nueva York. Y luego continuó su afición cuando se graduó de la escuela de teatro de Juilliard. "Tenía que lograr estar en la película. He visto todas sus cintas dos o tres veces, algunas muchísimas más. Su tono está empapado en mi mente", dijo Isaac sobre su empeño para unirse al elenco de La balada de un hombre común y trabajar con los Coen.
Nacido en Guatemala y criado en Miami como Oscar Hernández, el actor se cambió el nombre debido a que, como ha dicho, no quería está encasillado en roles del "gángster latino". "Llamarse Oscar Hernández en Miami es como llamarse John Smith. Hay decenas de páginas en la guía", resumió él. El empeño le resultó: hasta ahora ha participado en películas como Red de mentiras, W.E. y Agora, entre otras. Su rol más reconocible, en todo caso, fue como el príncipe Juan en la versión de Ridley Scott de Robin Hood.
El estreno en salas chilenas de La balada de un hombre común, el 6 de marzo, es sólo el comienzo de la explosión que vivirá su carrera en los próximos meses. Así, en 2014 estará en el thriller de época In secret, con Elizabeth Olsen; en el filme de suspenso The two faces of january, junto a Viggo Mortensen; en otro thriller, Mojave; en la cinta futurista Ex machina, y en A most violent year, del ascendente J.C. Chandor (Al is lost), donde interpretará al dueño de una compañía petrolera que ve su negocio amenazado en el Nueva York de 1981.
La tercera temporada también introduce nuevos personajes, como el medio hermano de Daniel, que causará que se distancie de su madre, interpretada por Madeleine Stowe, además de una periodista francesa que será clave para descubrir las intenciones de la familia Grayson.