Tal como en el debut, a Francia le costó. Su cartel de favorito parece pesarles. Cumplen con su tarea, pero con nota mínima. De manera agónica, superaron por 2-0 a una Albania que mostró mucho coraje.

Didier Deschamps dio un golpe de timón en la formación titular. Dejó en la banca a sus dos figuras: Paul Pogba y Antoine Griezmann. No le gustó el accionar de ambos en el debut. Los reemplazó con Kingsley Coman y Anthony Martial. Por su parte, el cuadro de Giovanni De Biasi no tenía a su capitán, Lorik Cana, expulsado ante Suiza. El juego era en Marsella, la sede de la batalla campal entre ingleses y rusos el pasado sábado.

El primer tiempo fue muy deslavado. El local no supo imponer la superioridad que, en teoría, tiene sobre Albania. Imprecisión en los pases, por ende dificultad en la elaboración de juego, tuvieron los galos durante los 45' iniciales. Con el paso de los minutos, los nervios asomaron.

La apuesta de Deschamps no resultó mucho. Por ejemplo, Martial trató de darle profundidad por la banda izquierda, pero con éxito relativo. Por ese lado, tuvo que chocar con Hysaj, el eficiente lateral derecho albanés, que juega en el Napoli. Albania, consciente de sus limitaciones, complicó a la defensa francesa. Se atrevió, dentro de sus posibilidades.

El segundo lapso fue todo para Francia, que exhibió mejor juego. El ingreso de Pogba le dio más velocidad en el ataque. Tanto el volante de la Juventus como Giroud tuvieron ocasiones para quebrar la resistencia albanesa. En los 68', Griezmann ingresa por Coman, y el delantero del Atlético fue el encargado de abrir la cuenta.

Otra vez al filo del reloj, como cuando el remate de Payet les dio el triunfo sobre Rumania. Un cabezazo de Griezmann, en el minuto 90, vence a Berisha. Luego, en el quinto minuto de adición, Dimitri Payet sentencia un 2-0 que le da la clasificación a octavos de final al anfitrión de la Euro.

Este domingo, enfrenta a Suiza, buscando asegurar el primer lugar del grupo A.