"Hoy día no ganaríamos una elección presidencial, no me cabe ninguna duda que hoy día no la ganamos". Así de categórico fue el diputado demócrata cristiano Pablo Lorenzini, al analizar los resultados de la última encuesta Adimark, que entre otros datos reflejó un 61% de rechazo a la labor de la Concertación y un aumento en la valoración positiva de los ministros del gobierno de Sebastián Piñera.
Esto último, por cierto, es un dato clave con miras a una futura elección presidencial que los partidos de oposición ven con incertidumbre, considerando que los últimos sondeos revelan que sólo la ex presidenta Michelle Bachelet podría instalarse como carta con opciones de derrotar a nombres como Laurence Golborne o Joaquín Lavín.
El diputado Lorenzini explicó a La Tercera que "hoy no tenemos liderazgo de recambio. Falta todavía una generación presidencial y creo que nos vamos a demorar. Veo, con mucho respeto, que gente como (Claudio) Orrego, (Ignacio) Walker, (Ricardo) Lagos Weber, (Carolina) Tohá o el mismo Marco Enríquez-Ominami no están potenciados. Están en el voto básico de la Concertación, cercano al 35%, pero no tienen todavía una estatura, por muchas primarias que quisiéramos hacer, porque el sistema no deja fluir".
-El ser gobierno le dio a la derecha el plus de generar y potenciar liderazgos a través de los ministerios. Eso lo perdió su sector. ¿Cómo podrían compensarlo?
-Seamos francos. Claramente, al estar en el gobierno, los ministros tienen prensa y, más que eso, tienen plata para hacer cosas, porque al final cuando van a regiones aparecen ellos entregando los aportes y proyectos. Hay una ventaja tremenda. En un ministerio no es que utilices los recursos a tu favor, pero tienes periodistas, asesores que te analicen los temas, en fin. Entonces estamos con toda la desventaja.
-Pero su sector ya tuvo esa ventaja por veinte años. ¿No hay un plan B sin ella?
-Cada partido debe generar un sistema de potenciamiento y ver cómo lucir a sus candidatos internos. Pero no veo un plan hoy. Cada partido está metido en sí mismo. Hoy día no ganaríamos una elección presidencial, no me cabe ninguna duda que hoy día no la ganamos.
-¿Cree que alcanzarán a levantar un nombre de aquí al 2013?
-Yo creo que es complicado levantar un nombre. Todos dicen que esperemos, pero ya vienen las municipales y al otro año las parlamentarias. Es complicado para la Concertación. Creo que nos va a ir bien en ambas elecciones, pero las presidenciales no las veo muy claras… salvo que se presente Michelle Bachelet.
-¿Y qué ocurre con su partido, donde tampoco se ven cartas probables, salvo quizás la opción del senador Walker?
-Y aún así, porque el senador dijo que le gustaría y que estaría disponible, pero no hemos hecho una encuesta propia. La clave es generar una instancia democrática de verdad, que no sea dirigida a los mismos nombres, porque entonces es más de lo mismo. En la DC no hemos visto el tema. Hay una directiva que está trabajando bien, pero no estamos consolidados. Se nos fueron varios en la pasada anterior y hay que recomponer los liderazgos. No tenemos candidato presidencial, aunque después de las municipales, de acuerdo a sus resultados, quizás podrían surgir algunos.
-El presidente de la UDI, Juan Antonio Coloma, aseguró que la encuesta refleja que la Concertación está en caída libre. ¿Qué opina de eso?
-Él está un poco confundido después de lo ocurrido con (Jacqueline) Van Rysselberghe y la ministra (Magdalena Matte). No pasa por un buen minuto y es (Pablo) Longueira el que me interesa más. Su opinión es mucho más objetiva. Creo que a Coloma se le acabó su tiempo, segundas partes nunca fueron buenas y si bien hizo una primera presidencia buena, ahora no ha sido así. Él no es quién para venir a darnos lecciones, salvo que quiera ser candidato presidencial, pero siendo el presidente del principal partido político del país no lo he visto nominado en ningún lado, ¿o no?