El estatus de Pablo Quintanilla, en el cross country mundial, es el que le da ser cuarto en el Dakar y mejor latinoamericano en la carrera de enero pasado. Pergaminos suficientes para sentarse con confianza a negociar con KTM, el equipo que este año le dio soporte en la máxima prueba del todoterreno, y que le había prometido ayuda en 2015 si le iba bien. Y le fue bien.

El motociclista llegó a un acuerdo con la firma austríaca, que lo apoyará para participar de cuatro fechas de la Copa del Mundo de la especialidad, incluyendo el Atacama Rally, y el Dakar 2016 (ver calendario). Además, el chileno podría ir a la fecha paraguaya del Dakar Series, porque la argentina se topa con el Rally de Egipto. El sanantonino tendrá una moto en Chile, con material y repuestos, y otra en Europa.

El nacional correrá en el equipo satélite KTM Warsawa Rally Team, con apoyo oficial de la fábrica, junto al polaco Jakub Przygonski, el austríaco Matthias Walkner y el australiano Toby Price, con quien peleó, etapa a etapa, ser la revelación en enero. Además, habrá cuatro pilotos support. "Es el futuro de KTM", dice el piloto.

"Es una termenda oportunidad. Con KTM llegamos a un acuerdo positivo para los dos. Me llena de energía poder participar de la Copa del Mundo con el mejor equipo. Finalmente, es tener una mejor preparación para el Dakar. No es lo mismo hacerlo en Chile que correr todos los meses, contra los pilotos que voy a enfrentar en enero próximo", dice el sanantonino.

Tal como durante el Dakar, Quintanilla explica que KTM no le pone metas: "Aunque algunas personas se toman esto de correr afuera como una presión, yo lo tomo como cualquier trabajo que hay que hacer bien. Es una oportunidad de mejorar, y yo quiero resultados, quiero ser de los mejores".

El calendario aleja la posibilidad de que Quintanilla compita en alguna fecha del Rally Mobil, como había planificado con un equipo. "Me gusta, pero será más adelante", comenta.