El sector eléctrico es uno de los que mira con más atención las modificaciones al Código de Aguas actualmente en trámite.
Varias voces de la industria critican la iniciativa, como los desarrolladores de pequeñas hidroeléctricas o minihidro, que estiman que la modificación impactará en la meta del gobierno de construir 100 nuevas centrales de este tipo durante el mandato de la Presidenta Bachelet.
Visión diferente a la que tiene el ministro de Energía, Máximo Pacheco, quien sostuvo que la reforma propuesta arregla una "distorsión" del mercado eléctrico, que es la posesión de derechos de aprovechamiento de agua que hoy no están siendo utilizados.
"Estamos perfeccionando el funcionamiento de este mercado, terminando con una distorsión que existe, y con una forma de acaparamiento que le hace mucho daño al sector eléctrico", señaló.
El secretario de Estado agregó que la reforma tiene una buena orientación, la que a su juicio se justifica con las devoluciones de derechos de aguas que han realizado algunas empresas, como el reciente caso de Endesa Chile. "Y van a venir más, anticipo que muchas empresas están discutiendo seriamente cuando van a devolver los derechos de agua", señaló.
El ministro hizo un llamado a que la discusión en torno a la tramitación del proyecto de ley no se transforme en un debate "ideológico ni político". Además, afirmó que si el Estado le concede derechos a personas o empresas son para satisfacer los intereses del país "y no corresponde que el Estado le entregue derechos de agua a las empresas y éstas no los utilicen. Eso en buen castellano se llama hacer la del perro del hortelano, que no come ni deja comer".
Respecto de la meta de construcción de 100 centrales minihidro, Pacheco comentó que esta cifra no está en riesgo por la reforma al Código de Aguas. "Somos un gobierno que hemos mantenido una permanente relación de cooperación y de diálogo con el sector gremial. Vamos a cumplir la meta", dijo.
Pese a ello, en el gremio no están muy convencidos. Rafael Loyola, director de la Asociación de Pequeñas y Medianas Centrales Hidroeléctricas (Apemec), apuntó que el gremio cree que el plan del ministerio "se ve directamente afectado" con la modificación al Código de Aguas. "La reforma sin duda tendrá efecto sobre la reactivación de la economía, en un rubro como el hidroeléctrico que es la tecnología de generación que implica más inversión de carácter local", agregó.
Acusación de diputados
El jueves, en tanto, la comisión investigadora que indaga sobre los procesos de aprobación de los proyectos Doña Alicia (centra hidroeléctrica en la comuna de Curacautín), y la línea de transmisión Cardones Polpaico, acusó directamente al ministro Pacheco de una "intervención más allá de sus facultades" en ambos casos.
Al respecto, la diputada UDI Andrea Molina señaló que Pacheco "pasó más allá de lo que él tiene de responsabilidad en su cargo", acusación que Pacheco desacredita.
Según el ministro, la propia diputada Molina envió un oficio al Contralor General de la República pidiéndole su opinión acerca de si el secretario de Estado había excedido sus facultades legales. "El contralor concluyó que no se advierte la concurrencia de ilegalidades en la participación del ministro de Energía, argumentó Pacheco, quien además resaltó el caracter estratégico de la línea de transmisión.