Padre de hermanos Rojo: "A ella la veía muy fuerte, como que no hubiera pasado nada"

<p>Pablo Rojo aseguró que pese a la muerte del menor de sus hijos, Jeannette Hernández anteponía sus celos.</p>




"Yo la seguí apoyando, estaba ciego. Iba a verla a la cárcel. Yo llegaba contento y salía derrotado. Todo eso me llevó a no ir a verla más a la cárcel", manifestó hoy al tribunal el padre de los hermanos Rojo a la hora de explicar cómo empezó a dudar de la inocencia de su mujer.

Durante la segunda jornada de declaración judicial, Pablo Rojo, dijo que fueron los mismos celos que manifestaba Jeannette Hernández los que le generaron interrogantes. Aseguró que no entendía que pese a la muerte de Esteban, ella insistiera en creer que él la engañaba.

"Esteban estaba siendo velado en la casa de un amigo. Ahí llegaron dos compañeras de la empresa que conozco hace muchos años. Una de ellas se me acercó a darme fuerzas. Al rato no las vi más, pero llegó Jeannette y me empezó a preguntar quién era ella y porqué me tocaban. Me sentí muy incómodo, porque eran los últimos momentos cerca de mi hijo y nuevamente me fui a pique", relató  el hombre.

Agregó que "por mi forma de ser, no debería haberme pasado esto. A ella la veía muy fuerte, como que no hubierra pasado nada".

Pablo Rojo también recordó que el día en que ocurrió la brutal agresión llegó junto a su esposa  . "Me quedé conversando con un vecino y Jeannette se adelanta y entra. La vi rara, apoyada en la puerta del auto. Dijo: Los niños, el Pablito. Fui a ver que pasaba, abrí la puerta y vi a Pablito con la cabeza rota, todo sangrando y me dije '¿qué pasó aquí?", manifestó.

Una vez en el interior del domicilio aseguró que "entré y no había nada. Giré y vi que la puerta de los niños estaba entreabierta. Ahí vi los pies de Esteban. Lo toqué y estaba frío, ahí supe que mi hijo ya no estaba más. Lo levanté y estaba tieso, helado y supe que mi cachorro ya no estaba más conmigo. Me senté en la cama a llorar".

Hernández está acusada  del crimen del menor Esteban Rojo Hernández (7) y las lesiones graves causadas al mayor de sus hijos Pablo. (15).

Antecedentes contenidos en la carpeta investigativa de la fiscalía, indican que Hernández habría agredido violentamente a sus hijos el 17 de enero del año pasado motivada por los celos y sospechas de infidelidad de su pareja.

A raíz de ello, habría atacado a los menores con un martillo que causó la muerte de Esteban, y dejó con secuelas neurológicas irreversibles a Pablo.

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