"Hay cuatro cámaras. Están en el comedor, en los mudadores, en la sala de recreación y en la sala cuna, donde duermen. Pudimos ver el sistema funcionando y la imagen y el sonido es muy buena. La verdad es que tener esto en un jardín municipalizado es muy bueno para nuestra tranquilidad como padres".

El relato es de Felipe Sarriá, padre de una de las niñas maltratadas en el jardín infantil y sala cuna "Renacer", ubicado en la comuna de Quilicura, y donde la semana pasada la denuncia de una vecina permitió descubrir cómo cuatro parvularias cometían maltratos tanto físicos como verbales en contra de los menores de los menores a su cargo.

La denuncia motivó acciones rápidas y concretas. La administración del recinto despidió al día siguiente a las parvularias y este lunes el Ministerio de Educación les entregó a los padres las claves de acceso para el moderno sistema de vigilancia que instalaron en el jardín.

"Nos entregaron las claves durante una reunión de todos los padres y creo que todos las recibimos más aliviados y tranquilos", explicó Sarriá, para quien "también ha sido positiva la llegada de las nuevas tías, que son un siete. Mi hija hoy volvió al jardín y como hacía mucho tiempo nos recibió riendo. Antes lo hacía llorando, como diciendo por fin llegaron".

Si bien como familia están más tranquilos, el padre explicó a La Tercera que su hija "aún mantiene secuelas sicológicas por todo lo que pasó. Ella tiene un año y once meses, pero habla bastante y cuando juega con sus muñecas, las maltrata como si estuvieran en el jardín, les grita que se porten bien. Es algo que tendremos que tratar con un sicólogo".

Aclaró, de paso, que en lo personal seguirá adelante con las demandas judiciales y, en particular, con la que presentó junto a la concejal de Quilicura (PPD) Miriam Bazáez y el diputado DC Gabriel Silber "en contra del municipio, pues creemos que tienen gran parte de culpa en esto, por no fiscalizar a quienes contratan".