Los palestinos calificaron hoy como "racistas" las declaraciones del candidato republicano a la elección presidencial estadounidense, Mitt Romney, que explicó la brecha entre el nivel económico de los palestinos y el de los israelíes por una diferencia de "cultura".
"Cuando venimos aquí a Israel y que vemos que el PIB por habitante es de unos 21.000 dólares, y que justo del otro lado en los sectores administrados por la Autoridad Palestina es de unos 10.000 dólares, constatamos una diferencia enorme y dramática de vitalidad económica", declaró Romney en Jerusalén durante un desayuno organizado para levantar fondos para su campaña.
"Es la cultura que hace toda la diferencia. Y cuando veo esta ciudad (Jerusalén) y todo lo que el pueblo de esta nación (Israel) logró, reconozco por lo menos el poder de la cultura y algunas otras cosas", agregó ante unos 40 donantes acaudalados durante un desayuno en una mesa en forma de U en el lujoso hotel King David.
En sus informes, el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional sostienen regularmente que las restricciones impuestas por Israel a la libertad de movimiento de las personas y de las mercaderías constituyen un factor clave que frena el desarrollo económico de los Territorios Palestinos. Pero Romney se abstuvo de mencionar ello antes de despegar hacia Polonia, última etapa de su gira en el extranjero.
"Las declaraciones de Romney son racistas. Tiene mucho que aprender, no conoce la región, su cultura y su historia", afirmó a la agencia AFP el negociador palestino Saeb Erakat. "Está claro que ignora que la economía palestina no puede despegar y alcanzar el nivel deseado mientras continúe la ocupación (israelí)", agregó.
Ayer el candidato republicano, rival del Presidente saliente Barack Obama en las elecciones del próximo mes de noviembre, se refirió a Jerusalén como la "capital de Israel", lo que despertó las críticas de los palestinos.
POLONIA
Tras Israel, Romney, llegó a la última estación de su gira internacional a Polonia, donde se reunió con el primer ministro Donald Tusk en la ciudad portuaria de Gdansk con Tusk.
Después mantuvo un encuentro con el ex líder obrero y premio Nobel de la Paz Lech Walesa, conservador católico y conocido por sus críticas al Presidente Obama y que fue quien invitó a Romney al país.
"Es muy cordial, se puede ver que irradia valores. Y que mantiene sus principios: tiene a su mujer cerca y tiene cinco hijos (...) Pensamos de forma muy similar", dijo Walesa tras la reunión con el candidato republicano, citó Dpa.
Un grupo de simpatizantes del presidente estadounidense saludaron con gritos de "¡Obama, Obama!" al republicano, que cerró hoy una visita a Israel y que anteriormente visitó Reino Unido.
En Gdansk visitó lugares que desempeñaron un importante papel en la historia de Polonia: el lugar donde cayeron en 1939 las primeras balas de la Segunda Guerra Mundial o el astillero de Lenin, donde los trabajadores crearon en agosto de 1980 el primer sindicato independiente en el entonces país comunista.
Romney terminará el martes su gira internacional, con la que espera mejorar sus credenciales de política exterior en su carrera a la Casa Blanca, con un encuentro en Varsovia con el presidente polaco, Bronislaw Komorowski y con el ministro de Exteriores, Radoslaw Sikorski y ofrecerá un discurso en la universidad de Varsovia, titulado: "La relación EEUU-Polonia y los valores de la libertad". También visitará monumentos en recuerdo del levantamiento en Varsovia durante la invasión nazi y del gueto judío.
El diario liberal de izquierdas "Gazeta Wyborcza" se preguntaba hoy si habría más declaraciones desacertadas de Romney, después de que en Reino Unido pusiera en duda la capacidad de organización del anfitrión olímpico y en su visita a Israel indignara a los palestinos al calificar a Jerusalén de "capital israelí".