El secretario de Defensa de EE.UU., Leon Panetta, y el presidente de Afganistán, Hamid Karzai, mostraron su preocupación por los recientes ataques a las fuerzas de la OTAN por parte de insurgentes camuflados de militares afganos.
Ambos líderes expresaron en una llamada telefónica su "preocupación compartida" sobre el desafío que suponen los ataques internos contra la coalición y las fuerzas afganas, informó el secretario de prensa del Pentágono, George Little.
Asimismo estuvieron de acuerdo en que los oficiales estadounidenses y afganos "deben trabajar aún más estrechamente para minimizar la posibilidad de ataques internos en el futuro", agregó Little.
El responsable de defensa telefoneó a Karzai después de que dos soldados estadounidenses de la misión de la OTAN en Afganistán (ISAF) murieran el viernes víctimas del ataque de un uniformado afgano en la provincia de Farah, en el oeste de Afganistán.
Panetta destacó los progresos que han hecho las fuerzas afganas mientras continúa el proceso de transferencia de las competencias de seguridad a la Policía y el Ejército del país, como parte de la retirada de las tropas de la OTAN que comenzó el pasado año y está previsto que concluya a finales de 2014.
El secretario de defensa agradeció a Karzai la condena pública que hizo de estos ataques y le exhortó a seguir trabajando de cerca con el comandante de la ISAF, el general John Allen, para fortalecer la cooperación para evitar estos ataques.
Panetta abogó por aumentar las medidas de contrainteligencia, realizar revisiones más rigurosas de los reclutas afganos y reforzar el compromiso con los ancianos de las poblaciones, "que a menudo desempeñan un papel clave para acreditar el personal de las fuerzas de seguridad afganas", agregó Little.
Esta semana el secretario de Defensa destacó en una rueda de prensa en Washington el creciente papel de las fuerzas de seguridad nacional afganas (ANSF) en la lucha contra los insurgentes y consideró que la intención de estos ataques -que han aumentado en los últimos meses- es "minar la confianza entre la fuerzas de la coalición y las fuerzas afganas".