El papa Francisco anunció el nombramiento del francés Jean Louis Tauran como cardenal camarlengo, la persona que se convierte en cabeza de la Iglesia católica tras la muerte o renuncia del sumo pontífice y hasta el nombramiento de uno nuevo.
El camarlengo es además la persona que certifica la muerte de un papa, y el encargado de tomar el anillo del Pescador del sumo pontífice -símbolo del poder papal- y destruirlo junto con su sello en la siguiente asamblea en presencia de los cardenales.
Tauran, de 71 años, sustituye como camarlengo al italiano Tarcisio Bertone, que ocupaba el puesto desde 2007 y a princios de diciembre cumplió 80 años, la edad a la que habitualmente se retiran los cardenales. Bertone fue además Secretario de Estado junto al papa emérito Benedicto XVI.
Por su parte, Tauran -presidente del Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso desde 2007- fue quien se encargó de anunciar la elección de un nuevo papa en marzo de 2013, pronunciando desde el balcón de la Basílica San Pedro el famoso "Habemus Papam" (Tenemos papa) ante una multitud.