A menos de una semana de haber dejado Chile, este miércoles el Papa Francisco hizo una evaluación de su visita y aseguró que el clero chileno rechaza abusos sexuales cometidos.
En medio de la tradicional audiencia general de la plaza San Pedro, el Pontífice aseguró que su reciente gira anduvo bien y agradeció a Chile y a Perú por la acogida.
La instancia, la dedicó a su viaje y renovó su "gratitud a las autoridades civiles y a los hermanos obispos que me recibieron con tanta premura y generosidad, así como a todos los colaboradores y voluntarios".
En ese marco, reconoció que su paso por el país estuvo precedido por varias manifestaciones, entre las cuales destacaron las acontecidas en rechazo a abusos cometidos por sacerdotes y por quienes serían encubridores.
Fue así como durante la audiencia comentó que "con los sacerdotes y los consagrados y con los obispos de Chile tuve dos encuentros muy intensos, más fecundos aún por el sufrimiento compartido por algunas heridas que afligen a la Iglesia en ese país".
"En particular -agregó- confirmé a mis hermanos en el rechazo a todo compromiso frente a los abusos sexuales contra menores, y al mismo tiempo en la confianza de Dios, que a través de esta dura prueba purifica y renueva a sus ministros".
Estas palabras llegan luego de la polémica que generó el respaldo que le entregó al obispo de Osorno, Juan Barros, acusado de encubrir abusos cometidos por Fernando Karadima.