A una semana exacta del fallecimiento de su padre, Jorge Seguel, mientras veía como Daniela disputaba nuevamente la final de la Copa Las Condes, La Pantera publicó en su cuenta de Facebook carta en la que agradece por las distintas muestras de apoyo que recibió durante esta difícil semana.

Léela a continuación:

Queridos amigos y amigas,

Luego de vivir uno de los días más difíciles y dolorosos de mi vida con la partida de mi padre Jorge Seguel, quiero detenerme y agradecer todos los actos de amor que hemos recibido como Familia.

Primero a toda la gente que sin conocerme me hizo llegar su afecto por todos los medios, presenciales o a través de mis redes sociales. Me reconfortó leer que estaban conmigo en el dolor. Y no sólo en el éxito. Es algo que valoraré por siempre.

A los medios de comunicación, por el respeto que tuvieron con el momento y por homenajear a quien me enseñó de niña a que nunca debía dejar de luchar por mis sueños.

A Colo Colo, el equipo de mis amores, por acompañarme en la dificultad. Sobre todo a Aníbal Mosa y Justo Villar que no me dejaron sola.

A la gente de Clínica Meds, que es mi casa. Esta vez no sólo sanaron mi cuerpo sino que calmaron mi alma.

A mis entrenadores, que en esta pasada no perfeccionaron mi tenis, sino que endulzaron de alguna manera la amargura que me llenaba.

A mis amigos, que demostraron porque los elegí para estar a mi lado. Siendo un real y verdadero apoyo en todo momento. Gracias en serio.

A mi familia, que a pesar del dolor está más unida que nunca, a mis hermanos y mi madre. Somos uno y los amo con todas mis fuerzas.

Y por último, quiero agradecer a mi padre, que desde siempre fue mi soporte, mi ejemplo a seguir y quién me dio el empujón para ser tenista profesional. Incluso dando su último suspiro en la galería haciéndome barra y viéndome disputar una final en mi país.

Papá, seguiré en busca de mis sueños como tú me enseñaste. No renunciaré a seguir forjando esta carrera que tanto te llenaba de orgullo. Haré que siga resonando tu último "Vamos Dani" hasta la eternidad.

Gracias por tanto amor,

La Pantera Seguel