Agentes antinarcóticos de Paraguay detuvieron hoy a cuatro personas y encontraron por primera vez en su territorio un laboratorio de elaboración de éxtasis, que también procesaba cocaína, para su venta en Brasil, EE.UU. y Europa, informó la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad).
El local, ubicado en Ciudad del Este, fronteriza con Brasil, utilizaba como fachada la producción de colchones y somieres.
Los agentes detuvieron allí a dos paraguayos y dos químicos brasileños que ya habían sido arrestados en su país natal en otro laboratorio de procesamiento de drogas, según la Senad.
Los detenidos son los paraguayos Bruno Franco Moreno, de 37 años, y Nicolás Asunción Ramírez, de 48 años, y los brasileños Daniel Demetrius Gibson, de 42, y Caio Márcio Maffato, de 51 años.
En el lugar las autoridades descubrieron 37 kilogramos de clorhidrato de cocaína de alta pureza y 3.287 pastillas de éxtasis, así como equipos como mezcladoras, balanzas de precisión, centrifugadoras, recipientes para mezclas y otros instrumentos para producir narcóticos.
"Es la primera vez que se detecta elaboración de drogas sintéticas en nuestro país", aseveró la Senad.
El pesado 10 de abril, la Secretaría alertó de que la zona conocida como la triple frontera de Paraguay, compartida con Argentina y Brasil, se ha convertido en un centro de distribución de drogas sintéticas procedentes de Europa hacia esos dos países.
Esas drogas llegan a Paraguay a través de correos aéreos, pero el descubrimiento del laboratorio, el más complejo encontrado hasta ahora en el país y uno de los primeros de la región, añade un factor nuevo a ese tráfico.
Según la Senad, la organización que lo operaba se asentó en Ciudad del Este hace dos meses y su objetivo era enviar los estupefacientes a Brasil, Estados Unidos y Europa.
El laboratorio tenía capacidad para producir hasta mil pastillas por hora, que en Paraguay valdrían 30.000 dólares.
Según la Senad, los mayores productores de esa droga sintética, que causa euforia, son Holanda, Bélgica y México, y los principales consumidores son Estados Unidos, Europa y, en América Latina, Brasil.
Además de su papel en el comercio de drogas sintéticas, Paraguay se ha convertido en una ruta de transformación en cocaína de la coca boliviana para su venta en Brasil y otros países con la implantación de laboratorios clandestinos en su territorio.
Paraguay es también el mayor productor de marihuana de Suramérica.