El nuevo gobierno paraguayo comenzó a preparar medidas alternativas para su comercio exterior, como aranceles para el ingreso de mercaderías provenientes de países vecinos, ante la posibilidad de una eventual sanción de la unión aduanera regional Mercosur que sesionará este viernes en Mendoza, Argentina.
"Si Mercosur resuelve bloquearnos, tendrá una consecuencia favorable al Estado porque en estos momentos el presupuesto general de gastos tiene un déficit (600 millones de dólares) y con la sanción tendremos que imponer aranceles a las importaciones desde Argentina, Brasil y Uruguay que nos darán mayores ingresos", anunció Manuel Ferreira, ministro de Hacienda.
Pero advirtió que "esos aranceles serán distribuidos a los productos con un alza de precios en el mercado, afectando el bolsillo de los consumidores".
En diálogo con la prensa agregó que "cualquier bloqueo no tendrá otros efectos traumáticos porque el 60% de nuestras importaciones viene de la República Popular de China y en cuanto a exportaciones, el 60% es soja, trigo, maíz y sus derivados que va a extrazona; 20% es carne vacuna casi totalmente a Rusia y 20% restante de otros rubros a destinos varios".
En 2011 Paraguay recaudó por exportaciones 5.500 millones de dólares pero importó 7.000 millones de dólares.
El presupuesto de gastos para este año es de 12.000 millones de dólares y para cubrir una parte del déficit, el gobierno del destituido Presidente Fernando Lugo emitió en abril bonos por 80 millones de dólares.
Un día antes de la cumbre de jefes de Estado, el Mercosur a través de la Unidad Técnica del Fondo de Convergencia Estructural, transfirió a Paraguay 60 millones de dólares para continuar los trabajos de ingeniería del proyecto de construcción de una línea eléctrica de 500 kilovatios desde la usina paraguayo-brasileña Itaipú hasta un pueblo 60 kilómetros al noroeste de Asunción.
Con esa línea de transmisión, según el proyecto, numerosas empresas de Brasil podrán instalar sus fábricas en territorio paraguayo, declaró el canciller José Félix Fernández. Cualquier "decisión que tome el viernes Mercosur será preferentemente política y no económica", añadió.
Desde el punto de vista político, "Paraguay sigue siendo presidente temporal de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) por lo que rechaza la resolución divulgada el miércoles en Venezuela acerca de su exclusión de la reunión de presidentes prevista para el viernes en Mendoza", dijo el canciller.
En principio, el traspaso de mando de Unasur a Perú se debía cumplir en noviembre en Lima, pero debido al malestar de países de la región por la destitución de Lugo a través de un juicio político en el Senado los Estados parte resolvieron organizar una sesión extraordinaria.
El vicepresidente Federico Franco asumió el poder para completar el periodo de gobierno de Lugo hasta agosto de 2013.
"Excluir a Paraguay de Unasur no tiene base jurídica en el derecho internacional. Esta no es una cuestión política sino jurídica", explicó Fernández en reunión de prensa.
Al mismo tiempo, la cancillería difundió un comunicado enfatizando que "en virtud del Tratado Constitutivo de Unasur, la convocatoria a reuniones extraordinarias del Consejo de Jefas y Jefes de Estado y de gobierno sólo puede ser realizada a través de la presidencia pro témpore, que en la actualidad es ejercida por Paraguay".
"La presidencia paraguaya en esta ocasión ha sido desconocida y la reunión extraordinaria se convoca por un procedimiento no previsto ni autorizado en el Tratado", agregó.
Fernández advirtió que "todo lo que se resuelva tanto en Mercosur como en Unasur no tendrá validez legal frente a los principios del derecho internacional porque el mismo tratado, de ambos organismos, no establece que se pudiera tomar decisiones en ausencia de uno de sus miembros plenos, en este caso Paraguay".
La ministra de Defensa de Paraguay dijo hoy, por otra parte, que le informaron que el canciller venezolano Nicolás Maduro reunió a los jefes militares paraguayos para solicitarles el respaldo de las fuerzas armadas a Lugo.