Es quien pone play a la cumbia dentro del camarín y el que armoniza los pasos del equipo. Un líder. Esteban Paredes quizás no fue la gran figura del triunfo, pero sí el valor clave del partido. El guión parecía escrito por él mismo.

Antes de salir al campo, fue lejos el más aplaudido en Macul, cuando los asistentes oyeron su nombre a través de los parlantes del Monumental, al momento en que el relator dictó la formación de Pablo Guede. Toda la hinchada del Cacique esperaba celebrar un gol del máximo anotador del equipo y del campeonato, con seis de goles.

El delantero complicó a la línea de tres jugadores de la defensa cruzada. Se movía por toda el área y mantenía la preocupación de los rivales, centrada en sus movimientos. No eran capaces de sostenerlo y generaba paulatinamente la desesperación en la defensa.

Cuando Colo Colo no tuvo la pelota, el capitán bajó constantemente hasta la mitad de la cancha para recuperarla. Se daba vuelta con su técnica habitual y pisó el balón en varias jugadas. Llegó a desquiciar a sus rivales, que por técnica y planteamiento fueron incapaces de detenerlo.

La Universidad Católica no jugaba bien y Esteban se benefició con cada situación provocada por este hecho. El primer error de la zaga cruzada fue aprovechado por el delantero. Minuto 5', centro desde la esquina izquierda. Germán Lanaro fue muy débil a la marca y Paredes logró cabecear solo hacia el arco. Un gol lleno de clase.

El delantero inquietaba y se mantenía firme mentalmente. Desarrolló un juego limpio, salvo durante un encontrón con Alfonso Parot, quien lo pasó a llevar en una jugada, lo que calentó su ánimo y respondió verbalmente. El árbitro mostró amarilla a ambos, pero ésta claramente amenazaba más al defensa que al capitán albo.

Al inicio del segundo tiempo conversó durante un minuto en el medio de la cancha con Guillermo Maripán, al parecer sobre los incidentes en la zona de camarines ocurridos en el descanso y donde Paredes tuvo un áspero diálogo con Mario Salas. Luego siguió con lo suyo. Católica intentó salir a buscar el empate y él continuaba bajando a recuperar. Aguantaba la pelota y quedó durante algunos momentos como enlace.

Pese a que físicamente no está al ciento por ciento, lo que queda demostrado en sus entrenamientos con carga diferenciada por dolores en la espalda, es él quien indudablemente lleva el equipo hacia adelante. Es fundamental en el esquema de Guede.

Además se asoció de buena manera en la zona de volantes con Andrés Vilches, Jaime Valdés y Ramón Fernández.

Para Esteban nunca fue problemática la marca de Maripán y Germán Lanaro. De hecho, el elenco de Salas estaba obligado a marcarlo con tres jugadores, incluso. Allí se sumaba Enzo Kalinski y Parot. Definitivamente no podían quitarle la pelota.

En los 58', tras una jugada de Pajarito Valdés, Paredes casi marca de taco. No fue un lujo antojadizo, sino que era su reacción al verse sorprendido con la pelota en los pies. Cristopher Toselli ya estaba batido, pero apareció Parot impidiendo el tanto en contra desde la raya de gol.

Sobre el final del partido tuvo el tercero del equipo y su segundo personal, pero pateó débil a las manos del arquero, al intentar un lujo. Era mucho pedir, el delantero ya se había entregado en la cancha. Es el ídolo de los hinchas y el gran fundamento que tiene a Colo Colo como líder exclusivo de la liga. Paredes lleva demasiada ventaja como el mejor futbolista del Clausura.